En un contexto donde el planeta se enfila hacia las energías renovables, en México hay una firme decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador para cumplir con las metas de reducción de emisiones contaminantes y aumentar la participación de las energías limpias en la matriz energética nacional, aseveró el presidente de la Comisión de Energía en la Cámara de Diputados federal, Manuel Rodríguez González.
Al participar vía virtual en el Energy Day, que organiza la Cámara de Comercio Británica en México, el diputado federal por Tabasco rechazó que la apuesta por los hidrocarburos contamine el compromiso climático de México e indicó que, aunque el camino aún es largo, en nuestro país la electricidad producida a través de fuentes eólica, solar y geotérmica asciende en la actualidad a 11.6 por ciento.
Expuso que aunque las fuentes renovables ocupan un tema central en la lucha contra el cambio climático, es importante dejar claro que, de acuerdo con la Agencia Internacional de la Energía “es demasiado pronto para augurar una rápida caída de la demanda del petróleo”, dado que en los próximos años la migración hacia otras opciones energéticas disminuirá su demanda, pero la petroquímica presionará la demanda hacia el alza.
El legislador de Morena explicó que al igual que en el escenario mundial, el camino emprendido en nuestra nación en torno a una mayor participación de las energías renovables y la descarbonización del planeta ya está en marcha, por lo que ahora la discusión se centra en los tiempos y la manera de conducirlo.
Indicó que, de acuerdo con lo mandatado en la Ley de Transición Energética, la Secretaría de Energía y la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía, concretaron la actualización de los escenarios y metas de energías limpias y eficiencia energética de la estrategia de transición para promover el uso de tecnologías y combustibles más limpios.
Manuel Rodríguez mencionó, que como parte de esta actualización, se establecieron dos escenarios: uno a 2035 y otro a 2050, diseñando una ruta para que México cuente con un sector energético basado en tecnologías limpias que promueva la productividad, el desarrollo sustentable y la equidad social.
Expuso que a través del Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen) se proyecta que la participación de las energías limpias en la generación de electricidad se incrementara gradualmente hasta representar el 39.9 por ciento del total nacional, de aquí al año 2033.
‘México cumple Acuerdo de París’
En el foro en el que participan expertos de talla internacional, con la finalidad de interactuar y reflexionar de manera conjunta sobre los efectos y consecuencias de la pandemia del Covid-19 sobre el sector energético, Rodríguez González dejó claro que México está cumpliendo con el Acuerdo de París, como parte de la causa común construida a nivel mundial para combatir el cambio climático y adaptarse a sus efectos.
Dejó claro que, en el caso de nuestro país, esta obligación también impuesta por la Ley de Transición Energética, fija como meta una participación mínima de energías limpias en la generación de energía eléctrica del 30 por ciento para 2021 y del 35 por ciento en 2024.
El representante popular de la Nación remarcó que en el entendido de que la transición energética es una corresponsabilidad internacional, en la Comisión de Energía de la LXIV Legislatura existe la mejor disposición de entablar mecanismos de colaboración con la Embajada de Inglaterra, un país que será sede de la próxima cumbre climática COP 26, para sumar esfuerzos que permitan impulsar las energías renovables.
Aseveró que desde la Cámara de Diputados “podemos afirmar que la promoción de las tecnologías limpias y renovables en México se encuentran resguardas por el marco jurídico y los instrumentos de planeación en la materia”.
El presidente de la Comisión de Energía en San Lázaro apuntó que las distintas fracciones parlamentarias representadas en este órgano legislativo están empeñadas en impulsar una mayor participación de las energías limpias.
Un ejemplo de este compromiso enfatizó Manuel Rodríguez, es la reforma a la Ley de Transición Energética aprobada con el propósito de promover la incorporación de energías limpias en la generación de electricidad que provee a la administración pública federal, que es uno de los principales consumidores.