CARTA ABIERTA
No es sólo que la candidatura del PRD a la alcaldía de Centro se le haya entregado a un enemigo histórico del partido. Es que Juan Manuel Fócil y Manuel Andrade tendrán que resolver cómo pedir el voto a los ciudadanos luego del desastre «político, económico y social» dejado por el gobierno perredista de Arturo Núñez, según palabras del gobernador.
Porque si bien la memoria del pueblo es corta, no lo es tanto como para que en menos de tres años se olvide el caos dejado por la pasada administración. Si bien Adán Augusto se comprometió a llevar a prisión a los responsables de esos «actos de corrupción», hasta ahora sólo se ha actuado contra uno que otro funcionario menor. El único secretario castigado ha sido el extitular de Salud, Rommel Cerna, ahora prófugo.
Es decir, la justicia se ha abstenido de proceder contra el exgobernador Arturo Núñez y su esposa Martha Lilia López, a pesar de haber sido señalados de presuntos delitos por las propias autoridades estatales. Todos esos señalamientos que inundaron los titulares de la prensa contra varios miembros del gabinete nuñista se quedaron en la estridencia mediática.
Una prueba irrefutable del desaseo del pasado gobierno fue la cacería política contra varios exfuncionario del sexenio que le precedió: el del priísta Andrés Granier Melo. A fin de obtener una legitimidad que no necesitaba, porque le ganó por una clara diferencia al priísta Jesús Alí, Núñez torció la ley para ganar popularidad, según se demostró después con la absolución judicial del Químico y de sus funcionarios.
Núñez terminó su sexenio en el caos, en medio de una crisis que llevó a paros laborales, a protestas y a señalamientos de malos manejos de recursos públicos. El nuevo gobernador morenista así lo señaló en cuanta oportunidad tuvo. En los dos primeros años de su gobierno, Adán achacó los pocos avances de su gestión al desastre heredado de la administración perredista.
Esto es algo de lo mucho que tendrá que explicar Manuel Andrade al momento de pedir su voto al electorado. Porque muchos de los males que ahora aquejan a los tabasqueños, en palabras del gobernador, se deben a esa herencia por la que aún se están pagando las consecuencias.
Al no haber existido castigo para Núñez, Andrade se ha convertido, de facto, en su cómplice involuntario y esta es una pesada losa que tendrá que cargar en su campaña. Y es que, hay que decirlo, la sombra del exgobernador perredista seguirá a MAD. Más aún cuando se sabe que Núñez no ha renunciado a las filas del partido. Después de todo, no hay que olvidar que el PRD tampoco hizo mucho para expulsarlo de sus filas, muy a pesar de haberle jugado la contra a su propio candidato a la gubernatura, Gerardo Gaudiano.
Por si no fuera suficiente, Núñez y Andrade han sido adversarios irreconciliables, desde que este sirvió de herramienta para que Roberto Madrazo le arrebatara al primero la oportunidad de ser candidato a gobernador, allá por el año 2000.
Así de surrealista es la política tabasqueña, así de surrealista es la aspiración de un candidato que tiene de perredista lo que Obrador tiene de conservador.
: ‘DREAM TEAM’ MORENISTA
Ayer se filtró una lista de nombres de posibles candidatos a diputados locales por Morena. A pesar de que hay algunos conocidos, como el de Jaime Lastra, ahora se sumaron los de César Burelo, Jesús Selván, Óscar Ferrer Ábalos , María Alejandra Pérez, Emilio Contreras, Nidia Naranjo y Mariluz Velázquez.
Por lo que se aprecia, el delegado de Morena, Antonio Alejo, y el dirigente Pedro Hernández Jiménez están haciendo hasta lo imposible por ir con los mejores hombres y mujeres en la próxima legislatura local.
El propósito es blindar al gobernador con una fracción preparada, a la altura de las fuertes exigencias que tendrá la segunda parte del sexenio.