FRANJA SUR
El gobierno de Tabasco que encabeza el expriísta Adán Augusto, tiene un pendiente con su pueblo: Aplicar la ley a la administración del ex gobierno de Arturo Núñez Jiménez que dejó sin aclarar más de cuatro mil millones de pesos.
Se recordará que el martes 17 de septiembre de 2019, la Fiscalía General del Estado, entonces en manos de Jaime Lastra Bastar, hoy presunto precandidato de Morena a una diputación, confirmó dos denuncias en contra de Núñez Jiménez, ambas promovidas por diputados locales.
Por esas fechas la prensa nacional consignó que “a lo largo de su administración, Núñez Jiménez acumuló observaciones por más de 9 mil millones de pesos por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y el Órgano Superior de Fiscalización del Estado (OSFE), principalmente por supuestas irregularidades en el sector salud y educación”.
Se presumió que el ex mandatario estatal sería investigado junto con su esposa, Martha Lilia López Aguilera, “quien se desempeñó como titular del DIF en Tabasco, organismo que solo en 2018 ejerció un presupuesto de casi mil millones de pesos”, mencionaron notas de diarios nacionales.
Pero hasta el santo día de hoy nada ha pasado con el caso Núñez Jiménez, por lo que sería saludable recordarle a los tabasqueños lo que dijo Adán Augusto, alzando la voz, en su toma de protesta como gobernador, incluso, recibió el aplauso de los asistentes, así como una amplia sonrisa y mirada de afecto de López Obrador, que fue sentado junto a Adán en aquel histórico 31 de diciembre de 2018.
Dijo Adán Augusto: “Entiendo de manera sincera el agravio de la sociedad tabasqueña y quiero precisar que la reconciliación no significa impunidad para nadie; no nos equivoquemos, la ley no es negociable. En Tabasco habrá respeto total al estado de derecho”.
Al parecer esas palabras se fueron al baúl de los olvidos y, en los hechos, ha sido sólo un discurso más de un político de nuestros tiempos.
Y es que nadie olvida en Tabasco que en noviembre de 2019, la Primera Comisión Inspectora de Hacienda reprobó la cuenta pública 2018 del ex gobernador perredista Arturo Núñez Jiménez, por no solventar observaciones por cuatro mil 497 millones 297 mil 438 pesos.
¿Qué pasó entonces? ¿Por qué el gobierno de Adán Augusto se hace como Tío Lolo en este caso? ¿Será verdad lo que dice la gente en las calles y en las redes sociales?
La voz popular señala que el gobierno de Núñez Jiménez habría aportado dinero a las campañas de López Obrador y de Adán Augusto y, debido a ello, hay quienes aseguran que los gobiernos de la 4T le hará a Núñez lo que el viento a Juárez, pues temen que hayan sido filmados por el alumno más avanzado del extinto veracruzano, Fernando Gutiérrez Barrios.
Cheque el lector, por ejemplo, por una cantidad ridícula, claro, en comparación a los más de 4 mil millones de pesos del caso Núñez, en julio de 2020 fue vinculado a proceso el ex director del Instituto Tecnológico de Comalcalco, Juan José Martínez, por el presunto desvío de más de 11 millones de pesos. Este caso pinta de cuerpo entero la forma de aplicarse la ley en la 4T, esto es, a mis amigos el perdón y olvido. A mis enemigos todo el peso de las leyes.
Por cierto, los que conocen plenamente el talante del gobernador que hoy padecemos los tabasqueños, dicen que tiene dos marcas que lo caracterizan: de joven sus amigos le decían “El Judío”, por su inmenso amor al dinero, y, cuentan que es archisupervengativo. Pero a Núñez, a pesar de que el notario con licencia lo odia en los hechos, no le podrá hacer nada el gobernador, pues está mangoneado por el presidente. Eso me apuestan los conocedores a profundidad del caso Núñez.
Y bien, el lector se preguntará por qué mencionamos en esta entrega al fallido ex mandatario estatal, quien llegó como cinco estrellas y salió por la puerta de atrás del Mercado José María Pino Suárez.
Ahí les va. Fue debido a la renuncia del diputado local Agustín Silva Vidal al PRD, político de poca monta y representante de los últimos estertores de nuñismo.
Este sujeto sólo sirve para recordarle a todo el mundo su perpetua sumisión a Núñez Jiménez. En el amarillo dieron gracias por su dimisión, pues sabían que es un palero del gobernador Adán, igual que el tal Ricardo Fitz, los Caballos de Troya.
Ahí se las dejo…
1.- les recomiendo checar en Twitter un video que subió el ex candidato presidencial Ricardo Anaya, en el que argumenta respecto a la reforma eléctrica propuesta por AMLO, que probablemente este martes apruebe la mayoría de Morena y sus aliados en la Cámara federal. Infórmese, para que no se quede sólo con la versión del “mundo feliz” que nos pintan en Palacio Nacional.
3.- Agradezco plenamente sus palabras a los lectores que me escribieron de Campeche y de Mérida. Ya abordaremos temas de esa región.