CARTA ABIERTA

En la celebración del 30 aniversario del MERCOSUR, y en honor del inicio de los festejos de los 200 años de la independencia de México, la revista electrónica «Dos Orillas”, editada por la embajada de Argentina en Uruguay, invitó al embajador mexicano en este país, Víctor Manuel Barceló Rodríguez, a compartir un artículo donde destaca los principales rasgos de los procesos históricos comunes que hermanan y consolidan el fuerte vínculo bilateral entre México y Argentina, mismo que ha sido ratificado y fortalecido a partir de la reciente visita oficial del presidente Alberto Fernández a su homólogo mexicano Andrés Manuel López Obrador.

Por considerarlo de interés periodístico, a continuación se transcribe la parte medular de este artículo que ha tenido una exitosa recepción en América del Sur:

“Iniciemos la tarea recordando que Argentina y México comparten historia. Ambos somos producto original de sendos proyectos de globalización, a lo largo de cinco siglos de vida planetaria. El descubrimiento, invasión y conquista de los dos países en las primeras décadas del siglo XVI es evidencia de que España era avanzada de la expansión europea.   

La conquista de México es cruel, rápida y contundente. Con apoyo de culturas antagónicas a la Mexicana, un puñado de españoles destruye grandes vestigios y crea un imperio colonial, yuxtaponiendo su cultura y sometiendo a millones de indígenas creyentes en la palabra de Cortés para liberarles de la tutela mexica.   

La primera imprenta llega a México en 1536, a la Argentina en 1700, obra de los jesuitas en Misiones.  La independencia se genera en élites criollas de ambos países desde fines del siglo XVIII, influye el liberalismo mostrado en la independencia de Estados Unidos y la revolución francesa.

El proceso emancipador se inicia en mayo de 1810 en Argentina, y en septiembre del mismo año, en México se da el Grito de independencia del cura Miguel Hidalgo.  La figura dominante de Benito Juárez como fundador de la República Federal Mexicana tiene en el tiempo en Argentina a las sucesivas figuras de Urquiza, Mitre, Sarmiento, con ideología liberal de influencia masónica, similar a la de Juárez, en otra evidencia de globalización. En las últimas décadas del siglo, en ambos países se da el liderazgo de dos figuras fuertes, que dominan la política: Julio Argentino Roca en la Argentina Porfirio Díaz en México. Los dos insertan a su país dentro de la economía mundial, en expansión. Argentina logra duplicar su territorio ocupando los que dominaban tribus nómades en el sur y noreste, lo que no ocurre en México. 

Hacia 1910 se presentan crisis político-sociales en los dos países que terminan con los regímenes oligárquicos. En Argentina el proceso es incruento, a través del voto universal, secreto y obligatorio, que permite al Partido Radical, de las clases medias, acceder al poder removiendo a conservadores. En México se inicia el cruento movimiento de la Revolución Mexicana, guerra civil de Francisco Madero y luego el campesinado a través de los caudillos revolucionarios.  

En 1930 tiene lugar en Argentina el primer golpe militar exitoso -de cinco posteriores- desde la sanción de la Constitución en 1853. Se inicia así medio siglo de constante inestabilidad política que se acompaña de un proceso de decadencia económica relativa. Mientras tanto, en México a partir de la década del 30, se institucionaliza el régimen político que dará al país un largo proceso de estabilidad político-institucional. En la última década del siglo XX, los dos países vuelven a sufrir un fenómeno de globalización paralelo y simultáneo.

En diciembre de 1993, México se incorpora al NAFTA, pasando a integrar el Mercado Común de Norteamérica, junto con Canadá y Estados Unidos A su vez, la Argentina firma en marzo de 1991 el Tratado del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) junto con Brasil, Paraguay y Uruguay. En el siglo XX, América Latina y el Caribe impulsan la urgente integración continental. La nueva relación bilateral México-Argentina, es clave de los procesos de integración en las dos orillas de Latinoamérica, dado que conforman desde 1960 la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio que deviene en 1980 en la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) en que estamos actuando 13 países de la región.  

Al comenzar el siglo XXI, México vive un cambio político histórico en la dirección de construir una democracia más plural, mientras que Argentina se recupera de la crisis socio-económica más grave de su historia. La necesaria integración continental de los bloques regionales en los próximos años dará el marco a la estrecha relación bilateral entre México y Argentina, iniciada con la muy grata y exitosa visita del presidente Alberto Fernández a tierras mexicas y sus acuerdos con el mexicano Andrés Manuel López Obrador, como piezas claves de los procesos de integración en las dos orillas de Latinoamérica”.

Barceló agrega algo más: “La necesaria integración continental de los bloques regionales en los próximos años dará el marco a la estrecha relación bilateral entre México y Argentina, iniciada con la muy grata y exitosa visita del presidente Alberto Fernández a tierras mexicas y sus acuerdos con el mexicano Andrés Manuel López Obrador, como piezas claves de los procesos de integración en las dos orillas de Latinoamérica”.

Hasta aquí el artículo publicado por la revista de la embajada de Argentina en Uruguay.

Por Jorge Núñez

Periodista nacido en Villahermosa, Tabasco. Ha sido reportero de los diarios Contacto y a. m. de León, Guanajuato, además de Tabasco Hoy y Milenio Tabasco. También estuvo como jefe de la oficina del diario Correo de Guanajuato en la ciudad de León. Fue jefe Información de Diario Presente. Ha cubierto campañas presidenciales y a la gubernatura. Desde hace doce años es autor de la columna CARTA ABIERTA, publicada en varios portales electrónicos Twitter: @jorgenunez63