CARTA ABIERTA
Los hechos violentos registrados la mañana del miércoles a las afueras de la sede estatal de Morena le pasarán una factura muy cara a Jesucita López, la autoproclamada presidenta de este partido.
Los videos de cristales rotos y el golpe en la cara que uno de los seguidores de Jesucita le da a quien trabaja como recepcionista en la sede del instituto político, sólo por negarse a abrir las puertas del edificio, le están dando la vuelta al país con el consabido daño a la imagen del presidente Obrador.
Los adversarios del paisano han empezado a sacar renta política de esas imágenes, argumentando que si es incapaz de mantener la paz del partido en su tierra natal, mucho menos tiene la estatura para seguir dirigiendo los destinos del país. Por eso, lo sucedido esta mañana en Morena tiene una repercusión nacional, sin olvidar que podría ser uno de los temas de la ‘mañanera’ de este jueves.
No basta con que Jesucita se haya deslindado de estos hechos, ni que se hable de infiltrados que buscaron tronar su movimiento. Los culpables de los destrozos y las agresiones físicas son simpatizantes que le acompañaron en la protesta para exigir su reconocimiento como dirigente y la apertura en la asignación de las candidaturas.
En todo caso, la autoproclamada dirigente de Morena tendrá que investigar y señalar a los responsables de esos actos violentos que tienen de plácemes a los opositores del Gobierno de Adán Augusto. Una ayudadita a la señora López: fuentes dignas de crédito señalan que el agresor del recepcionista del edificio del partido es Antonio Marquez, aspirante a la alcaldía de Macuspana.
De hecho se sabe que el dirigente estatal de Morena, Pedro Hernández Jiménez, está en la tarea de recabar la información a fin de presentar la queja correspondiente ante la Comisión de Honor y Justicia. De acuerdo a lo previsto en los estatutos, los responsables de esos actos podrían ser expulsados.
Por lo pronto, Pedro Hernández, quien no estaba en el partido al momento de registrase esos acontecimientos porque tenía una gira en Cárdenas para sondear los ánimos ante el próximo anuncio de los candidatos federales y locales, condenó los destrozos y la agresión a uno de sus compañeros. Dijo que las puertas de Morena están abiertas para todos, siempre y cuando se conduzcan por las vías del diálogo y la civilidad.
Aprovechó el momento para reiterar que la dirigencia nacional, el Instituto Nacional Electoral y el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco, ya han dado su veredicto en torno a reconocer la validez oficial de su dirigencia. Señaló que Jesucita debe reconsiderar sus acciones y respetar la legalidad de las instituciones.
La gran pregunta es: ¿quién está detrás de Jesucita López?, ¿quién alienta una protesta que está fuera de toda lógica legal o estatutaria? Nadie lo sabe bien a bien, aunque todo mundo conoce la cercanía que ella ha tenido con Chelalo Beltrán, actual consejero de Pemex y quien se ha declarado abierto adversario político del gobernador Adán Augusto.
Por lo pronto, la gran perdedora de lo sucedido es la señora López porque convirtió en violencia lo que pretendía ser un reclamo pacífico; porque no hubo un enfrentamiento, hubo la agresión de un solo lado.