DE PRIMERA MANO

Fuera de la “república de internet”, la población se nota desenganchada de la reyerta de los partidos de cara a las elecciones de este 6 de junio. La ciudadanía parece más ocupada en salir de su situación económica empeorada por la pandemia de coronavirus que por sumarse a uno u otro bando de políticos ansiosos de poder en Tabasco.

La “calma chicha” se respira desde la Navidad anterior que el gobierno pagó 10 mil pesos a las más de 200 mil familias que se vieron afectadas por la inundación de fin de año, a quienes un par de meses atrás también se les había dado un apoyo similar para resarcir las pérdidas causadas por el manejo erróneo de la presa Peñitas y las precipitaciones atípicas de 2020.

Cuando ha comenzado el segundo trimestre del año, en su mayoría los tabasqueños dedican su tiempo a procurar los enseres que les está regalando la administración de Andrés Manuel López Obrador a quienes perdieron mucho en el pasado temporal.

Tan solo en Centro 88 mil familias serán favorecidas con, por lo menos, un refrigerador, una estufa y un ventilador.

En otro frente la comuna a cargo de Evaristo Hernández Cruz ha empezado una cruzada para pavimentar las arterias más dañadas de la ciudad de Villahermosa, mientras el gobierno del estado acelera el paso para inaugurar el libramiento que aliviara el congestionamiento vial hacia la zona de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT).

Y, al mismo tiempo, grandes máquinas se comen el Periférico a la altura de la glorieta de Guayabal hacia Teapa, en donde también se levantará otro libramiento para desahogar el tránsito.

Acaso acciones como esas distraen a la sociedad, y por eso su desinterés en pleitos políticos.

Da la impresión de que las cruentas batallas políticas en Facebook no representan el sentir mayoritario de los tabasqueños.

Es cierto que en los centros de reunión las charlas versan sobre los candidatos, que uno y otro bando aventuran hipótesis sobre el desenlace de las elecciones y que el periodismo político hace sesudos análisis para tratar de descifrar la situación política del estado.

Pero hay otro dato duro que parece explicar la falta “calor” en la jornada electoral cuyas campañas comenzaron el domingo pasado en lo federal y dentro de dos semanas en lo local: en los comicios intermedios por lo general hay poca afluencia de votantes.

Esto es, el abstencionismo siempre es mayor a mitad de un sexenio.

En Tabasco está demostrado que en las últimas tres elecciones sexenales (2006, 2012 y 2018) la votación fue copiosa porque los ciudadanos querían sentar a López Obrador en Palacio Nacional.

Mas para este 6 de junio no hay un acicate que los azuce a cruzar las papeletas.

Por eso desde ahora se perfila una elección de estructuras, en la que se advierte el triunfo de la fuerza que posea mayor capacidad para movilizar a los suyos y para “cuidar” las urnas.

Los partidos están faltos de cuadros que por sí solos provoquen en los electores las ganas de volcarse en las urnas como lo hicieron en las últimas tres votaciones federales.

PARA SU INFORMACIÓN…

UN BOTÓN DE muestra del estado en que se encuentra el PRI: hasta hace poco logró que en Cunduacán alguien se interesara en la candidatura a la alcaldía. La persona que aceptó la nominación se gana la vida vendiéndoles a funcionarios cuadros de su familia. En ese municipio, hasta el abanderado “independiente” tiene más aceptación que quien va por el Revolucionario Institucional.

Por Rodulfo Reyes

Rodulfo Reyes Aguilar ha sido corresponsal en Tabasco de los diarios El Financiero, La Crónica de Hoy y El Heraldo de México, también ha publicado reportajes en El Universal y Excélsior, además de las revistas Impacto y Ámbar, así como en el semanario Punto. Ha sido director local del diario regional Por Esto! Actualmente publica una columna en el diario El Heraldo de Tabasco y es corresponsal de Notimex, la agencia de noticias del Estado mexicano.