De Primera Mano
En los últimos cuatro sexenios, en Tabasco el partido en el gobierno nunca había ganado “tanto” en unas elecciones intermedias como Morena este año. Varios son los factores del fracaso opositor, pero quizá la mayor causa sea la identificación de la mayoría ciudadana con la formación del presidente Andrés Manuel López Obrador, así como la consideración de que las obras del gobierno estatal han superado ya el trabajo de las dos últimas administraciones, la del priísta Andrés Granier Melo y la del perredista Arturo Núñez Jiménez.
El calibre del triunfo vinotinto puede verse con el hecho de que los adversarios del régimen no han soltado ruidosas declaraciones para impugnar el resultado. El propio exgobernador Granier, quien atrajo los reflectores por disputar por segunda vez la alcaldía de Centro, se ha mantenido al margen tras dar a conocer un video en el que acepta que no le fue favorable el resultado.
El discurso de desaseo electoral en la jornada del 6 de junio solo lo mantienen voces que aplaudieron a rabiar al papá de Fabián.
Aquí la información dura:
A.- En 2003, en los comicios a mitad de la gestión del priísta Manuel Andrade Díaz, el PRI logró cinco ayuntamientos, mientras el PRD se quedó con 12.
A pesar del enorme rechazo en contra, el tricolor retuvo la presidencia municipal de Centro.
En aquella ocasión, desde el gobierno se quiso justificar la derrota con el argumento de que “por cuidar la capital descuidamos el resto del estado”.
B.- Ya con Granier en Plaza de Armas, en 2009 el Revolucionario Institucional y sus aliados (Panal y PSD) lograron nueve alcaldías, mientras el PRD se hizo de cinco, el PT de una y el PAN de dos.
C.- En 2015, con el perredista Arturo Núñez en la Quinta Grijalva, el sol azteca obtuvo nueve presidencias municipales, el PRI cuatro, el PVEM dos; y una el PAN y Morena, respectivamente.
D.- En el actual gobierno, en los comicios del pasado domingo 6, Morena se hizo de14 comunas, y se quedaron con una, respectivamente, el PRD, Movimiento Ciudadano y un candidato independiente.
Como puede verse, el vintotinto triunfó en 14 de 17 administraciones municipales, un resultado nunca antes visto desde 2000 que el movimiento de AMLO atrajo la simpatía de casi la mitad de Tabasco (en ese año el PRI “ganó” la gubernatura con poco más de un punto de diferencia, pero la elección fue anulada por sucia).
Por eso se impone la pregunta: ¿Por qué ahora Morena superó con creces a PRI y PRD, sus principales antagonistas, al grado de que por la alcaldía capitalina la diferencia fue de tres a uno, un resultado no registrado desde principios del nuevo siglo?
A dos semanas de la contienda, son tres las respuestas encontradas:
1.- Los tabasqueños se sienten cómodos con la ayuda social que llega de la federación y, por tanto, quieren que el paisano que gobierna el país no tenga problemas políticos enfrente.
2.- En tres años, la gestión de Adán Augusto López Hernández ha hecho más que en los sexenios de Granier y Núñez.
3.- A la ciudadanía se le “refrescó la memoria” de que en Villahermosa podía asentarse un gobierno como el que encabezó Granier en la comuna y en Plaza de Armas, y por eso salió a darle su “voto de castigo” al PRI.
En adición, lo risible de estas elecciones es que priístas de medio pelo se atreven a reclamar fraude, si bien lo más patético es que hay quienes están alentando a Granier para que busque la presidencia del partido, pese a que la dirigencia nacional ha decidido que Dagoberto Lara Sedas continúe al frente.