CHAPALEO
NO, NO es nada más de me voy y ya. Será mi mejor amigo, mi hermano, pero en Las cuestiones de política nadie puede confiar ni en su propia sombra.
ESTÁN TAN duros los cocolazos allá en la paila con aceite hirviendo de la 4T, que no es lo mismo “amar que ser amado” en tiempos de vientos huracanados y mucho menos en tierra ajena en donde lo mejor es ponerse a buen resguardo y protegerse por si las moscas
AL HOMBRE de la “concha gruesa” le gustan las aventuras y aceptó un cargo de mucha responsabilidad, el de mayor importancia junto al presidente del país, ese que para poder salir adelante hay que tener el colmillo retorcido y enfrentar con eficiencia y prontitud todo aquello que se desconoce y que no se aprende en las universidades ni en los cafés con los amigos, mucho sentadito en su zona de confort.
EL HOMBRE esta consciente de lo que le espera, sabe que sus enemigos están dentro de la misma casa, y seguramente por eso atendió la sugerencia de su amigo, hoy su jefe, “pide licencia para que puedas regresar si algo pasa”. Y así lo hizo
EL CONGRESO del Estado hizo los ajustes necesarios y acordó “El Gobernador constitucional puede solicitar licencia al cargo por tiempo indefinido después de su segundo año”
“CON 29 votos a favor, cero en contra y dos abstenciones, el Congreso de Tabasco consumó la intención del gobernador con licencia Adán Augusto López Hernández, de dejar abierta la posibilidad de regresar al poder Ejecutivo en cualquier momento”
Y AÑADE “para reincorporarse al ejercicio de sus funciones, el gobernador constitucional con licencia informará por escrito al presidente del Congreso, quien notificará de inmediato al gobernador interino para que cese en el ejercicio”
EN POLITICA no hay nada escrito y de que todo se puede, se puede. Para hacer la jugada correcta y no dejar huellas, sin dar chance y sin tomar en cuenta la opinión del pueblo, ya que presumimos de ser demócratas, Carlos Manuel Merino Campos fue secretario de gobierno por menos de una hora, cargo que visiblemente no le gustó y de inmediato renunció, porque eso no era lo que le habían ofrecido, la promesa fue hacerlo gobernador y de inmediato hizo presencia el dedo divino
Y CLARO que hay más, mucho más, pero por hoy me voy, no sin antes comentarles que se confirma el refrán “palo dado, ni Dios lo quita”