CÁBALA
Después de la confirmación del gobernador interino y los ajustes naturales en el gabinete estatal, se considera superada la fase política del sorpresivo relevo en el gobierno de Tabasco.
Entrar ahora al arte de gobernar, trae un sinodal “tradicional” que la nueva administración tendrá que enfrentar en este último trimestre del año, sus propios retos; teniendo si, en el equipo, gente de experiencia en estos casos.
La primera es la información que autoridades meteorológicas han comenzado a difundir ante la llegada de “La Niña” en el Atlántico que entrara de septiembre a octubre, con posible continuidad para el invierno 2021-22.
Esperamos en este lapso, 9 ciclones en el Golfo de México que de acuerdo a las estimaciones traerá en un promedio de 15 a 22 días de lluvia en las próximas semanas.
¿Por qué preocupa?
La junta de vecinos por ejemplo del arenal Casa Blanca, ha tenido que entrar a la corrupción en los tiempos de la 4T, con la coperacha y pago de un vactor que permita desolvar unas alcantarillas que no han podido ser destapadas desde la inundación de 2020.
Como estos, muchas otras zonas de la ciudad, registran el mismo problema. Las “ligeras lloviznas” de agosto, han generado sustos en la mayoría de las zonas bajas de la ciudad.
Y es que pese a toda la ayuda social registrada desde la inundación de noviembre pasado, la operatividad “técnica” para recibir las lluvias “atípicas” del 2021, no se ha desplegado, estando ya los capitalinos a pocos días de comenzar con el famoso: “enciendan el cárcamooooo”.
Otra de las condiciones que generan incertidumbre, es el “pico” de contagios por Covid 19, que han registrados cifras similares a las de agosto de 2020 cuando el mundo colapsó por la pandemia.
El regreso a clases y desplazamiento de jóvenes, aún con el decreto de inmovilidad nocturna, no ha frenado la “ola” de contagios, sumando mayor preocupación entre alumnos y madres de familia.
El número de casos activos crece y el de los fallecimientos ya superó los 25 diarios.
El panorama, si bien no es “catastrófico”, si se convierte en los dos primeros retos que la nueva administración va a enfrentar en los próximos días; así, “entre aguas y olas”.
Kybalión.- Previó a la entrega de su tercer informe de gobierno, el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, inquietó a la prensa de la “mañanera” al hacer una apología no descifrada del “primer día de Cortés y la última noche de Cuauhtémoc”.
La alegoría concentra un cambio rotundo y puntual en la historia de México. El paso pues, la transición.
Ya en la ceremonia formal de ayer, generó mayor lectura entre líneas: «Falta lo que diga la naturaleza, la ciencia y el creador, pero si tengo suerte y termino, creo que vamos a consumar la obra de transformación…”.
A mitad del camino.