¡Feliz fin de semana!
Con el inicio de las nuevas administraciones municipales, se renuevan esperanzas, para responder a las demandas ciudadanas, pero, en la realidad, lo cierto es que, ya no caben los pretextos, ni culpar al pasado, nadie tiene derecho a fallar y cada vez más, la sociedad tampoco se callará…
Les comparto:
ENTORNO
Y las rechiflas al presidente:
En el lugar menos pensado, en su tierra, en su agua, el presidente Andrés Manuel López Obrador vivió lo que fue la primera gran manifestación en un acto público durante su gobierno, el domingo primero de marzo del año 2020, la nota de la “rebelión” de los sancarleños en Macuspana, se convirtió en noticia, internacional.
A partir de ese hecho, en algunos otros lugares del país, se repitió la misma historia, aunque no con la intensidad de aquel inolvidable domingo.
¿Y qué ocurrió ese domingo de marzo del 2020?
Un completo desastre.
Antes de que la comitiva presidencial arribara a la cancha deportiva donde se desarrollaría el único evento, tres grupos de manifestantes se mantenían en la carretera principal, furiosos, esperando la llegada del convoy para interrumpir su tránsito.
Los reclamos de corrupción eran fundamentalmente contra el edil de Macuspana, Roberto Villalpando Arias, pero también alcanzaban a la autoridad estatal.
Y la inacción para escuchar las demandas y peticiones:
En el centro de la Villa, el personal responsable de la avanzada por parte del gobierno estatal y municipal, desde un secretario de estado hasta directores y coordinadores, juntos, despreocupados, sonrientes, departían en una pequeña fonda, mientras afuera auténticos ciudadanos molestos y algunos facinerosos mentaban madres y gritaban a voz en cuello. Hay videos, fotografías y material de todo eso.
¿Qué provocó el principal reclamo?
Más allá de la politiquería, la indignación colectiva inició en la cabecera municipal, cuando una ciudadana reconocida militante de la izquierda, de la tercera edad recibía el saludo del presidente Andrés Manuel López Obrador y a quien esta le agradeció todo su apoyo, pero, le aclaraba que Villalpando Arias había resultado un pésimo alcalde.
Entre otras; la inconformidad principal era el incumplimiento de la construcción de una gran planta potabilizadora en la región, además de mejorar el sistema de distribución a la red de drenaje y agua para la cabecera municipal y que en más de un año no se había cumplido nada.
Lo que mal inicia mal termina.
Concluido el desastroso encuentro ciudadano del presidente, el gobernador Adán Augusto López Hernández y el alcalde que había sido para informar sobre las acciones emprendidas por el gobierno federal, a la comitiva le llevó casi media hora salir porque los ciudadanos permanecían atravesados en la calle, algunos reclamando y los menos haciendo peticiones.
Antes de despejarse la calle, una ciudadana alcanzó al gobernador y actual secretario de gobernación para hacerle una petición personal, aprovechando el momento en el que López Hernández dialogaba con un conocido que había acudido a la gira presidencial de tres días.
En ese momento, la vía se liberó, pero le permitió al mandatario estatal -solicitarle a su interlocutor- atender a tan afligida señora, no había, en ese momento, ningún funcionario del gobierno estatal, ni municipal y solo uno del gobierno federal, de Macuspana, Julio Ernesto Gutiérrez Bocanegra, quien finalmente resolvió la petición formulada a López Hernández.
Un año siete meses y 3 días después, ese mismo personaje, Julio Ernesto Gutiérrez Bocanegra, protestó el lunes pasado como presidente municipal de Macuspana:
“Me asumo legal y legítimamente como el presidente municipal del Municipio más importante, políticamente de México en la actualidad. Me inunda la emoción y me invade el orgullo de ser el presidente municipal de la tierra que vio nacer al mejor presidente en la historia reciente de esta República, al hijo predilecto de Macuspana, Andrés Manuel López Obrador”.
Sin derecho a fallar…
“no tengo derecho a fallar. Hoy la negra noche en la que sumergieron a nuestro municipio ha quedado atrás. Juntos y entre todos construiremos días de luz, de esperanza y de grandeza para Macuspana”.
Y la respuesta a ese clamor ciudadano de hace un año, siete meses y tres días se acompañó del anuncio oficial:
“El inicio de la construcción en el mes de octubre de la Planta Potabilizadora “San Carlos” que con el apoyo del gobierno de la República, la coadyuvancia del gobierno del Estado y del Municipio y con una inversión de 600 millones de pesos se hará justicia a la zona Yoko´tan y a la cabecera municipal…”.
El gobernador Carlos Merino Campos acudió a la ceremonia y marcó una diferencia personal en su discurso y en su trato.
Con un nuevo secretario de gobierno, con un nuevo edil y con aquel gobernador preocupado por lo ocurrido en aquella visita presidencial ahora en funciones de secretario de Gobernación, podrían empezar a contar una historia distinta y reivindicar aquel domingo para olvidar.
CONTORNO
Y la rebelión por el Poder
Y no todo es armonía en los municipios…
En Emiliano Zapata, el gobierno de MORENA que encabeza, José Bernat Rodríguez, quien rindió protesta como alcalde el pasado 04 de octubre enfrenta resistencias y oposición al interior de grupos y personas de su mismo partido, lo que complicará el proceso de gobierno.
En Centla, ocurre algo similar, la alcaldesa, Lluvia Salas López, también de MORENA, enfrenta resistencias no solo de su partido, sino igual de otras facciones que persiguen la suplantación de quien obtuvo su victoria en las urnas.
Nada nuevo bajo el sol o simplemente más de lo mismo…
javiermarinhdez@hotmail.com