CARTA ABIERTA
El gobernador Merino ha llamado a la tranquilidad, pidiendo a la población no alarmarse ante el incremento del desfogue en la presa Peñitas, provocado por las recientes lluvias en la región. Lo cierto es que lo sucedido es parte de los protocolos que mantienen la CFE y la Conagua. Es decir, son acciones ejecutadas cuando se superan ciertos rangos de agua acumulada.
El gobernador de Tabasco ha explicado que la presa Peñitas desfoga 700 metros cúbicos como medida tomada por algunas horas, no de forma constante. De manera preventiva hay protocolos a seguir. Cuando los niveles en el vaso se acercan a los 85 metros o superan cierto rango hay que desfogar un poco más. Esto ha sucedido muchas veces, por lo que ahora no se debe caer en el alarmismo, menos cuando se hace sólo por 24 horas. Por ejemplo, los datos del martes en la mañana revelan que el desfogue subió a 700 metros cúbicos por segundo, cuando lo normal es de cerca de 400.
En resumen, pese a las lluvias de los últimos días y las precipitaciones previstas por el frente frío 28 de la temporada, Tabasco no está en un foco de emergencia por inundaciones. No obstante, ya se ha citado a sesión extraordinaria a los alcaldes, así como de Protección Civil, Conagua y demás involucradas para seguir evaluando las condiciones climatológicas.
Otro punto que da tranquilidad a la población es el trabajo que las autoridades han hecho en la limpieza de drenes y el mantenimiento de cárcamos, que hasta hace poco estaban en total abandono. Ahora mismo se están usando diez dragas de la Marina en aguas de los ríos González y Grijalva. Mediante el Consejo de Protección Civil se vigila y monitorea la situación de los ríos, aunque estos no son un riesgo debido al desazolve que han tenido en los últimos meses.
Es decir, el Gobierno de Tabasco sigue haciendo todo lo que está en su ámbito para proteger las zonas urbanas y rurales. Y lo que son las cosas: los meteorólogos han dicho que 2022 será un año muy seco, así que es probable que luego de estas lluvias se entre a un periodo de seca bastante duro y entonces habrá que tomar medidas diferentes. Así es el Edén.
En palabras del Capitán Merino, lo registrado en estos días no es motivo de preocupación; menos, si se compara con lo sucedido en octubre y noviembre de 2020, cuando cayeron 600 milímetros de lluvia por mes; una barbaridad. Lo de ahora debe monitorearse, sí, pero es nada comparable con un estado de emergencia como los vividos en el pasado reciente.
: OPORTUNISMO
Fiel a su esencia personal y política, un diputado federal de Morena le juega al oportunismo al usar la reforma eléctrica para beneficio individual, pensando que esto le ayudará a ser candidato a la gubernatura.
Conocido como “El Chapulín” por brincar de un partido a otro, recién cosechó un sonoro fracaso con su especie de consulta abierta sobre la reforma eléctrica. Ninguna de las figuras más importantes del partido le siguió el juego y no tuvo más remedio que dar marcha atrás y cancelarla.
Caso muy distinto ha sido el del presidente de la Comisión de Energía en San Lázaro, Manuel Rodríguez González. Este sí, desde el principio, ha arrimado el hombro al presidente Obrador para la aprobación de esa reforma constitucional. Actuando con la seriedad del caso, este legislador tabasqueño sí ha sabido cuidarse de no caer en un protagonismo con fines puramente personales.
: POR FIN
Como era de esperarse, el delegado del Infonavit, Jesús Alí, ha dado una conferencia de prensa para dar a conocer los avances de la institución que, por cierto, son relevantes y de interés público. Ya era hora de que rectificase.
Este es el problema de muchos servidores públicos de la actualidad: llevar el bajo perfil, la discreción, a los límites del ausentismo público.
No entienden que al difundir los logros de las dependencias a sus cargos es ayudar al gobernador y al presidente Obrador. A ningún ser pensante le incomoda verlos trabajar y responder con resultados ante los ciudadanos.
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