CARTA ABIERTA
Twitter: @jorgenunez63
Roberto Madrazo ha venido cargando contra el presidente López Obrador. Lo ha hecho por medio de Latinus, el canal de noticias que, según sus propias palabras, es financiado por su hijo Federico Madrazo Rojas, aún militante del Partido Verde Ecologista de México. El dirigente del PVEM en Tabasco, Miguel Velez, sigue protegiendo al vástago del exgobernador al negarse a expulsarlo de sus filas.
El hijo del ‘Ciclón’ ha revivido la vieja pugna política y hasta personal con el macuspanense. Al inicio del sexenio presidencial, ROMA quiso acercarse a su enemigo de siempre. Le mandó varios ‘mensajes’ públicos a fin de acomodar a su hijo, y a él mismo, dentro de la Cuarta Transformación. Declaró, por ejemplo, que AMLO le ganó a Felipe Calderón las elecciones presidenciales de 2006, en las que él quedó en tercer lugar. Al mismo tiempo le deseó éxito en su nuevo Gobierno. ROMA afianzaba también sus lazos con el gobernador chiapaneco Manuel Velasco, para que Federico fuera escalando posiciones nacionales en el Verde. Algunos analistas especularon que ‘Pico’ ocuparía un lugar en el gabinete de Adán Augusto. Pero como no ocurrió ni lo uno ni lo otro, el clan Madrazo no tuvo más remedio que replegarse y seguir su propio camino, sabiendo que Obrador no había tragado el anzuelo.
Ese camino fue buscar un coto de poder informativo para señalar las fallas del huésped de Palacio Nacional y de la 4T en general. Por eso es que el exgobernador le dijo al director de Atypical TV, Carlos Alazrazki, que su hijo Federico estaba patrocinando a Latinus y a Carlos Loret de Mola. Desde ese momento, en el PVEM se encendieron las alarmas porque ‘Pico’ sigue como miembro activo, al tiempo que el partido es aliado de Morena.
Más allá de que lo publicado por Latinus tenga sustento o no, lo interesante para el entorno político de Tabasco es que Roberto Madrazo ha retomado ese viejo pleito con Andrés Manuel. Para hacer la historia corta, la telenovela comenzó desde 1987, cuando ROMA fue designado dirigente estatal del PRI para coordinar la campaña de Salvador Neme Castillo contra el tepetiteco y que al final favoreció al priista en medio de protestas de fraude.
En 1989, tras la llegada del interino Manuel Gurría Ordoñez a la Quinta Grijalva, esa pugna siguió con los cargos que Madrazo ocupó en el partido y como diputado federal, al tiempo que el macuspanense organizaba marchas ciudadanas de protesta a la Ciudad de México. En 1994 volvieron a verse las caras como candidatos a la gubernatura de Tabasco. El priista ganó la elección, pero Obrador impugnó el resultado con la presentación de las “cajas de la ignominia”. El impasse se destrabó en enero de 1995, con el célebre desalojo de Plaza de Armas, encabezado, entre otros, por Juan Molina Becerra, que le permitió al hijo del ‘Ciclón’ entrar a Palacio de Gobierno. El conflicto costó, incluso, la caída del secretario de Gobernación, Esteban Moctezuma Barragán, tras fracasar en su intento de sacar a ROMA del Gobierno tabasqueño.
Luego vinieron seis duros años de enfrentamientos Madrazo-AMLO que abarcaron el contexto nacional y que crisparon la política tabasqueña. Otro capítulo se vivió en el año 2000, cuando el candidato perredista de AMLO, Raúl Ojeda Zubieta, perdió la gubernatura ante el madracista Manuel Andrade. El resultado fue la anulación de las votaciones. En la segunda elección, MAD volvió a ganar y de nuevo se encontró con el rechazo público de Andrés Manuel.
Otro round entre los tabasqueños se dio en 2006, en las elecciones presidenciales. Obrador por el PRD y Madrazo por el PRI perdieron ante el panista Felipe Calderón. Desde aquí, ROMA se alejó de la política y AMLO fortaleció su presencia nacional. Si bien Madrazo reconoció a fines de 2018 que el paisano iba adelante de Calderón en sus conteos, lo vino a decir ¡quince! años después. Esto pareció, de forma evidente, un acto de oportunismo ante el presidente morenista.
Roberto Madrazo y Andrés Manuel siguen inmersos en esa vieja rivalidad que los acompaña desde siempre. Es una pugna que nació para quedarse y seguir dando material para las más variadas lecturas superficiales y de fondo. Dos paisanos confrontados, de nuevo, en el espectro de la política nacional, con un Madrazo queriendo revivir viejas glorias por medio de su hijo Federico, usando a Latinus y a Carlos Loret. ¿Hasta dónde les alcanzará?, ¿hasta dónde les resistirá el presidente?