CHAPALEO
(55 años de actividad periodística en prensa, radio y tv)
ESTO QUE les voy a platicar fue cierto, narrado por uno de los servidores públicos que sufrió las reprimendas, no por falta de experiencia, sino por confiar en la honestidad de quienes se dicen amigos. Solo mencionaré un nombre Georgina Trujillo Zentella.
CUANDO ELLA fue alcaldesa de Centro, uno de sus más cercanos colaboradores, platicó algunas de sus experiencias de trabajar junto a esta dama; comenta que él creyó, estaba rodeado de buenos amigos, incapaces de chismear nada, lo escucharon, le preguntaron y la charla resultó amena. Finalmente se despidieron y cada quien a seguir componiendo el mundo.
DICE ESTE amigo que cuando llegó a su oficina, lo primero que vio sobre su escritorio fue una tarjeta, escrita a mano, en la que decía “tenga cuidado con sus comentarios”
LA PRIMERA pregunta que me hice, me comentó después ¿Quién? ¿tan pronto? . . . Y desde entonces -dice- “cerré el pico”
LOS QUE somos ilustres desconocidos, que nos movilizamos a pie o en transporte público, entramos a la tiendita, o nos detenemos a husmear en los cafés, tenemos la oportunidad de escuchar pláticas interesantes, que si uno les da forma resultan casi obras de arte. Claro, no se pueden dar nombres de los declarantes, pero bien utilizado para los que escriben, les hacen el día.
COMO AQUEL grupo de maestras de educación primaria que estaban en un café un día 15 o 30, de cada mes, que son los días que según ellas bajo la muleta de que van a cobrar suspenden sus labores retirando a sus grupos de alumnos a las once de la mañana, cuando todo mundo sabe que su salario se lo depositan en sus cuentas de banco. “Son logros del sindicato” arguyen.
ESTAS MAESTRAS hablaron de los problemas que existen dentro de los planteles educativos entre los maestros, de las carencias de insumos para desinfectar, de lo que pasa cuando no llega el maestro de grupo y ellas tienen que atenderlos y también de directoras o directores gandallas, Etc.
PERO PARÉ oreja cuando comentaron lo de la nueva disposición de la Secretaria de Educación Pública, que ningún niño de primaria sea reprobado haya ido o no a la escuela, haya hecho o no la tarea, todos deben pasar al año siguiente con seis. No habrá reprobados
LA IMAGINACIÓN que no tiene límites, de inmediato me trajo a la mente aquel malecón que no aguantó ni la entrega allá en Tepetitan, Macuspana, o el de Jalpa de Méndez, o en los dos distribuidores viales que se están construyendo en Villahermosa, que ya han sufrido costosos deterioros y en los que se supone trabajaron profesionales de la construcción.
¿QUÉ VA a pasar cuando los niños de hoy sean ingenieros, médicos, arquitectos, abogados, en sus distintas especialidades? ¿y con calificación de seis desde la primaria?
Y CLARO que hay más, mucho más, pero por hoy me voy.