CARTA ABIERTA

Si bien el presidente Obrador no logró su objetivo en el Congreso para modificar la Constitución y darle este rango a la Reforma Eléctrica, en la práctica sí consiguió ese propósito luego de que la Suprema Corte ratificara la constitucionalidad de la Ley de la Industria Eléctrica, LIE.

¿Qué significa esto que luce tan complejo para el ciudadano de a pie?: que los cambios propuestos en la iniciativa presidencial de reforma constitucional sí se aplicarán. El más importante, a decir de AMLO, es que la CFE podrá despachar el 55 por ciento de la energía en el país al usar la totalidad de sus 200 plantas. Hasta ahora, la paraestatal estaba obligada, por ley, a despachar sólo el 38 por ciento usando el 70 por ciento de su capacidad, poniéndola en franca desventaja frente a los privados que hasta ahora tenían preferencia en el suministro.

Otro de los importantes cambios puestos en vigor por la LIE es la declaración de ilegalidad de la generación de energía para el autoabasto de las empresas. Por eso es que Obrador llamó a dialogar  a las veinte compañías etiquetadas en este rango, a fin de evitar juicios penales promovidos por parte del Gobierno federal ante lo que el jefe del Ejecutivo calificó como un “mercado clandestino”.

La LIE ha llevado igualmente al sobreseimiento de los juicios de amparo presentados en la Corte. Contra lo que muchos suponían, no habrá una lluvia de protestas porque la constitucionalidad de la Ley Eléctrica evitará que sean recibidos como materia de juicio. El primer ejemplo de lo que se viene en este sentido es la decisión de la SCJN por desechar la acción de inconstitucionalidad promovida por el anterior gobierno estatal de Colima, cerrando así la última de las impugnaciones.

Otro resquicio cerrado por los ministros ha sido la confirmación de la validez de la votación emitida el 7 de abril. El 19, la Corte dejó en firme la votación de 7 contra 4 y así se desechó la demanda de un grupo de senadores de oposición, quienes consideraron que había un supuesto error o manipulación en el conteo de votos y que por ahí se abriría la puerta a los amparos.

Si bien en la práctica habrá una reforma eléctrica, lo que supone una muy trabajada victoria para López Obrador, sería un error echar por tierra el logro político obtenido por la oposición en el Congreso. El rechazo a la propuesta sirvió para mostrar que el PRI, PAN, PRD y MC están unidos para echar abajo las otras dos importantes reformas constitucionales en puerta: la Electoral y la de la Guardia Nacional. Como comentaba ayer el periodista radiofónico Fernando Valdés en su noticiario Notinúcleo, habrá que ver ahora si AMLO está dispuesto a pagar el costo político de enviar esas dos iniciativas, sabiendo que no pasarán.

Si bien hay que escuchar a quienes piensan que AMLO envió su reforma eléctrica sabiendo de antemano que no pasaría, para exhibir a los opositores como “traidores a la patria”, lo cierto es que este plan derivó en el afianzamiento del bloque opositor con miras a las elecciones del 5 de junio en seis estados y, desde luego, de cara a las presidenciales de 2024.

En concreto, la Ley de Energía Eléctrica, que tuvo en el diputado morenista Manuel Rodríguez a su principal impulsor en el país, hará las veces de esa reforma obradorista. Este logro hay que adjudicarlo, sin menoscabo, al legislador tabasqueño, si bien otros buscaron colgarse a última hora por un interés muy personal.

Por lo demás, es un exceso esa campaña que el líder nacional morenista Mario Delgado y la senadora Citlalli Hernández han emprendido contra los legisladores que votaron en contra. Y es que ya lo había dicho el presidente en su mañanera del lunes: “Ganó la democracia”. Y sí, es lo que sucede en las democracias modernas cuando hay pluralidad y respeto por quienes no piensan exactamente lo mismo. A ver si lo van entendiendo los grupos más extremistas del partido oficial.

Por Jorge Núñez

Periodista nacido en Villahermosa, Tabasco. Ha sido reportero de los diarios Contacto y a. m. de León, Guanajuato, además de Tabasco Hoy y Milenio Tabasco. También estuvo como jefe de la oficina del diario Correo de Guanajuato en la ciudad de León. Fue jefe Información de Diario Presente. Ha cubierto campañas presidenciales y a la gubernatura. Desde hace doce años es autor de la columna CARTA ABIERTA, publicada en varios portales electrónicos Twitter: @jorgenunez63