Para Usted
En efecto, no deja nada bueno, nadar de a muertito (hacerse el loco, no hacer nada, dejando que las cosas sigan su curso, a la espera de los acontecimientos) y, mucho menos, hacer tiempo, que no es otra cosa que hacer cualquier cosa para entretenerse mientras se espera que llegue el momento señalado para hacer algo o para que se produzca algo.
Hacer tiempo o nadar de muertito es una estrategia de quien, como político o servidor público, no quiere comprometerse; la estrategia en mención, no ayuda a nadie, ni siquiera a quien lo practica, porque a la larga, sufre las consecuencias de su “inmovilismo”.
Por lógica (si es que existe en esto de la política de la Cuarta Transformación 4T), el gobernante, el alcalde o alcaldesa, el líder, el político, el servidor público, no puede hacer tiempo o nadar de muertito; si lo hace, conlleva el riesgo de consecuencias sociales incalculables.
Vemos pues, para el tema que nos ocupa nuestra entrega de este día, que hacer tiempo no es solamente dejar ser, dejar pasar, sino evadir la responsabilidad y el compromiso adquirido ante la sociedad a la que se gobierna; no mover un dedo; pedirle permiso a un pie, para que el otro camine, en tanto se continua no aportando nada para la solución de los problemas.
Mire usted, nos llama poderosísimamente la atención el hecho de que los alcaldes de los 17 municipios de Tabasco, la única obra social que boletinan, difunden, festinan y celebran, es la entrega de sillas de ruedas, despensas, bastones; pero no hablan de obras de infraestructura y de programas de reactivación económica.
¿Para eso querían ser alcaldes o alcaldesas?, para conformarse con la entrega de bastones, despensas, sillas de ruedas, kilos de carne, tanques de gas; en verdad, no vale la pena concebir la administración del presupuesto público y del ejercicio del poder, basado en la entrega de dádivas que, como dijera el Maestro Carmito, “no está mal, pero tampoco está bien”, pues se supone que durante las campañas de proselitismo ofertaron grandes obras y acciones para superar la pobreza y alcanzar desarrollo y bienestar sostenidos.
Los alcaldes y alcaldesa de Tabasco, especialmente los de Morena y la Cuarta Transformación, a eso se han dedicado; a entregar dulcitos y mejoralitos, en ves de encontrar y aportar acciones que solucionen los problemas de las comunidades; haciendo tiempo, en espera de saltar o brincar a otros cargos.
Carentes de planeación, los ayuntamientos municipales navegan a la deriva; sin cartas de navegación y sin un timón firme que los lleve a puerto seguro; insistimos, haciendo tiempo; echándole la culpa al gobierno anterior; vociferando que las carencias ya existían, que les dejaron las arcas vacías; laudos y deudas por doquier.
Aunado a todo lo anterior, los actuales 17 ayuntamientos municipales, pueden presumir de malas administraciones y de que no tienen dinero solo para el gasto corrientes (salarios), ya que, para gasto de inversión, apenas de entre un 3 y un 5 por ciento del presupuesto; aunque dentro de sus propias administraciones hay desvíos financieros.
Y ¿Por qué?, porque educaron a la población al no pago; por ello, no tienen recaudación y solo tienen el dinero que les llega por el pago de permisos y derechos, esperando los recursos que les envíe el gobierno federal; sin embargo, esos recursos les llega en la proporción de lo que ellos recauden; por cada peso, la federación les entrega dos; pero como no recaudan, insistimos, no tienen nada.
Hacer tiempo es la consiga que se tiene en las alcaldías de Tabasco; los presidentes y las presidentas, están a la espera para brincar, cual vil chapulines, a nuevos cargos; en tanto, los municipios se ahogan en problemas, pero eso sí, para disque taparle el ojo al macho, entregan sillas de ruedas, bastones, despensas, como si eso resolviera las dificultades.
En La Línea de Fuego** Desde la tribuna del Poder Legislativo del estado, la diputada cardenense Soraya Pérez Munguía, formuló un firme y enérgico llamado, al tiempo de una propuesta con punto de acuerdo, para que las secretarías de Ordenamiento Territorial y Obras Públicas (Sotop) y Movilidad (Semovi), informen detalladamente, con respecto a montos y resultados de los estudios y proyectos específicos que llevaron a la realización del distribuidor vial de avenida Universidad (la magna obra insignia del gobierno de la 4T tabasqueña).
En La Línea de Golpeo** la representante popular del tricolor, subrayó que se deben dar a conocer montos y resultados de los estudios y proyectos específicos de ingeniería, arquitectura y de instalaciones, periodos de prueba, normas de calidad y especificaciones de construcción; así como también el análisis costo-beneficio, de factibilidad de acuerdo a dicho estudio, de la obra en mención, ya que, de acuerdos a expertos consultados, el distribuidor vial presenta incumplimiento en los tiempos de entrega, errores de diseño en los pasos deprimidos; falta de planeación y estudios de movilidad, e incremento en el costo original.
Los Malosos** Soraya Pérez Munguía, aseguró que nadie sabe qué está pasando con el distribuidor vial de Avenida Universidad; los tráficos que se arman en la zona son terribles y las demandas ciudadanas siguen aumentando** por cierto, continúa el bloqueo por parte de habitantes de la colonia Magisterial y de la López Mateos, lo cual complica diariamente el tránsito de personas y vehículos** por lo que también llamó desde tribuna al titular de la SEMOVI, informe fecha y documento que acredite la autorización para la ejecución de esta obra, así como los resultados obtenidos de los estudios de impacto vial, ambiental y movilidad** habrá que estar muy pendiente de la respuesta oficial** fue todo por hoy**hasta mañana Dios mediante.