Uno de los retos más inmediatos e importantes de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco es la vinculación con los sectores productivos, afirmó la directora de la División de Ciencias de la Saluda, Miriam Carolina Martínez López.
Considera importante también recuperar la acreditación de las licenciaturas que se perdieron durante el covid y que haya más apertura y democracia en la UJAT, para que se participe en los procesos por los espacios.
Luego de 36 años de labor académica y administrativa, la Doctora Martínez López considera que puede aportar y asume el reto de aspirar a encabezar los destinos de la máxima casa de estudios del estado y “ser la segunda rectora, pero de la 4T, que no ha llegado a la UJAT.
¿Cuál es el espíritu del reciente Informe presentado como titular de la División Académica de Ciencias de la Salud de la UJAT?
Plasmamos lo que logramos hacer en cuatro años a pesar de los dos de la pandemia. Mantuvimos la acreditación de todas las carreras, logramos que todos los estudiantes egresados al titularse tuvieran el reconocimiento que hace Ceneval, que salieran con el máximo Nivel 1.
Y como la universidad no puede estar alejada de la sociedad, nosotros construimos los cimientos para que se hiciera el laboratorio de Biomedicina molecular en el Hospital Juan Graham para que durante la pandemia del Covid apoyara a la sociedad; también les dimos dos refrigeradores ultracongeladores, para la vacuna Pfizer que requería una temperatura baja y no había en el estado.
Por la pandemia del Covid, quedó evidenciado a nivel nacional el déficit de especialistas y enfermeras. ¿Por qué ese déficit?
Siempre ha habido un déficit muy grande. De acuerdo a la OCDE, el porcentaje de médicos y enfermeras debe ser de 3.7 por cada 100 mil habitantes y nosotros tenemos 1. Se da más déficit en las zonas más alejadas porque el personal médico se concentra en las ciudades y no hay en ellas tampoco demasiados porque los hospitales requieren un especialista en cada uno de los seis turnos divididos en el día, los de la noche y los fines de semana. Si en un turno no hay un cardiólogo y se presenta un infarto, las posibilidades de sobrevivir del paciente son pocas.
Por eso debido a la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador, casi se triplicó el ingreso a las especialidades médicas. Nosotros damos el aval de las especialidades y en febrero se titulará la primera generación de esa propuesta del presidente. En lugar de egresar 60 estudiantes especialistas, serán 167 nuevos. Es un gran avance para el estado, para el país. Muchos regresan a sus estados, pero siempre será mucho mejor.
¿Qué hace la DACS sobre las especialistas del futuro como la geriatría y las enfermeras, al invertirse la pirámide población que ya no demanda tantos pediatras?
En la licenciatura se anexaron las especialidades de geriatría y gerontología. En 2008 abrimos la maestría con la Universidad de Barcelona en Gerontología social con doble titulación, el de México y el de España y con ello de la Comunidad Económica Europea. Ese proyecto ya no está, fue para dos generaciones. No se renovó…
…¿Usted lo renovaría?
Lo tenemos que renovar porque estamos formando profesionales para el mundo. Nos hacen falta especialistas en Tabasco, México y el mundo. El objetivo es que la gente haga lo que quiere hacer, dónde lo quiera hacer. Finalmente, todos queremos estar cerca de casa. Sola una persona hizo la doble titulación.
Ha habido históricamente en el país un divorcio entre las universidades y la sociedad. ¿Cómo está actualmente la UJAT y los sectores productivos de Tabasco?
Nosotros, como División de Salud, cada año nuestros estudiantes realizan prácticas clínicas, hay unas que son fundamentales, como el internado rotatorio y el servicio social de los médicos que van a los hospitales los primeros y a los centros de salud los segundos. Es una aportación de nuestra División y de nuestra Universidad a la mejora del servicio en el Sector Salud. También en el caso de enfermería van en su mayoría a realizar servicio social en hospitales. El nuevo modelo de salud que habrá en el estado nos ayudará muchísimo, porque los estudiantes podrán estar no en los hospitales, pero sí en las comunidades. El nuevo modelo divide lo que es hospitalización y servicio médico con el que es promoción y prevención. Por ejemplo, para que los diabéticos no terminen siendo insuficientes renales o ciegos. Que los niños no lleguen a ser diabéticos a temprana edad. En la atención primaria nuestra División estará muy fortalecida, porque todos nuestros alumnos realizan prácticas en la comunidad.
Ese ejemplo de la DACS se debe replicar en otras divisiones de la UJAT. Está la refinería, las oportunidades de turismo con el Tren Maya, para atraer turistas.
La universidad está preparada…
Pero los profesionistas de las empresas petroleras vienen de fuera…
Ahí lo que se tiene que hacer son convenios. Como dice el presidente: “hay que ser de territorio, no de escritorio”. Eso es lo que se tienen que buscar, acercamientos con las grandes empresas que están llegando al estado y nosotros tenemos en la UPCH los geofísicos, los matemáticos, los ingenieros petroleros, químicos. De la Universidad en Tenosique , hacer su acercamiento con el sector productivo.
Ver que ahora una de sus currículas sea para apoyo del Tren Maya. Si hay que hacer algo para mejorar la currícula de los ingenieros petroleros, hay que hacerlo. Pero la UJAT sí está formando ingenieros petroleros, geofísicos. Son gente muy preparada con nivel 2 y 3 en el Sistema Nacional.
¿Entonces se desaprovechan profesionales tabasqueños en el sector energético?
No se si se desaprovechen, pero algo está pasando y hay que trabajarlo en conjunto. No es asunto solo de un director, sino que tiene que ir acompañado con su rector y con el gobernador, probablemente. Solo así se pueden hacer que las cosas crezcan. Si no tenemos esa iniciativa de convencer a los del gobierno que son los que se acercan a los grandes empresarios y mostrarles cómo es nuestra currícula y los entrenamientos, porque los estudiantes pueden hacer sus prácticas ahí para ganar la confianza profesional.
Así como nuestros estudiantes realizan prácticas en el Sector Salud (si preguntamos el 80 por ciento son egresados de la UJAT), hay que vincular más a cada División con su sector productivo. ¿Y cómo lo tenemos que hacer?, mandándolos a realizar prácticas profesionales a esos espacios, porque es ahí donde se prueban los muchachos. En el salón de clases no se prueba nadie. En nuestros laboratorios no se prueba nadie. De pronto se cerraron las prácticas profesionales..
¿Por qué?
No lo sé, pero habría que averiguarlo para tratar de abrirlas de nuevo. Yo la verdad he tenido una lucha por lo de las prácticas profesionales. Pero no dejo no permito que no lo hagan. Porque mis estudiantes, un tercio deben hacerlo en la escuela, un tercio en la promoción y prevención, y dos años y medio tienen que estar en hospital de residentes, para que ellos puedan decir “soy médico”.
Nosotros estamos acreditados, porque acreditamos que tenemos una infraestructura adecuada, unos maestros adecuados, bien preparados; un plan de estudios bien hecho y buena la estrategia de enseñanza en el interior. Eso es loque nos califica una acreditación.
Eso es lo que nos acredita el Ceneval, el producto que salió de esa estructura y por eso me siento orgullosísima de los diplomas que nos dieron.
¿Cuáles son los retos que tiene la UJAT?
La vinculación es uno de los retos más fuertes, quitarle tanto amarre. No sé por qué de pronto apareció ese amarre, porque a los muchachos les piden experiencia, dónde han trabajado para tener un empleo y ahí es donde viene el problema. Igualmente, asegurarnos que los procesos se evalúen. Con el problema del Covid, la mayoría de las otras divisiones, no acreditaron sus licenciaturas, por el mismo problema que les cayó la fecha y estábamos fuera…
¿Se perdió algún semestre?
No. Se perdieron las acreditaciones. Toda la Universidad prácticamente estaba acreditada. Ahorita son muy pocas las licenciaturas…
¿Qué implica estar acreditado?
Que llegue un organismo y evalúe que tus procesos los estás haciendo correctamente.
¿Entonces, ese es un gran reto para la UJAT?
Es un reto muy grande. Aumentamos el número de profesores-investigadores en el Sistema Nacional de Investigadores. Tenemos todas las condiciones para la acreditación. Habría que revisar los programas y planes de estudios para ver si están acordes con los nuevos tiempos, si están respondiendo a los nuevos retos que hay, como la refinería, el Tren Maya. No solo es formar por formar, sino formar gente que se esté necesitando.
¿Cómo está la relación entre cantidad de alumnos y la calidad de la enseñanza?
Para que la UJAT estuviera en los niveles de entre las 20, 25 del país, era porque estaban las acreditaciones, porque no te pueden decir en qué lugar estás, si no te han medido. Nosotros teníamos al 85 por ciento de la Universidad medida, calificada correctamente y certificada. eso nos subía los rangos. Pero ahora tenemos la otra evaluación del Ceneval de cómo salen realmente mis estudiantes. Los tengo que medir, es el otro gran reto. Las cosas buenas se tienen que continuar y se le tiene que agregar algo, que eso se mejore, una aportación más. Si cada rector de la UNAM le cambiara todo, no sería la UNAM lo que es.
Desde su reciente informe, circuló la versión de que se quería proponer para asumir la Rectoría de la UJAT.
Yo he vivido toda mi vida académica y laboral en la UJAT, 36 años de trabajadora. Aquí crecí como persona y como profesional. Siempre he creído que le puedo aportar algo a la universidad, sin restarle algo de lo que se haya hecho, porque cada rector o la rectora le dieron algo que es valioso y que entre todos la tenemos que hacer crecer. Siento que podría aportarle algo, lo que me corresponde que sería la democratización. Hace años yo fui parte de la “contra” de la Universidad, por la falta de espacios abiertos. Dentro de la universidad no se pueden cerrar los espacios.
¿Concretamente, en qué democratizar?
En los procesos, cada vez se están abriendo más, pero que abran un poco más y que el mundo que quiera aportarle tenga la oportunidad, independientemente de que se pueda uno quedar o no. Esa es la parte más importante que tendría la universidad para cambiar. Regresarle a los maestros sus derechos que teníamos y que se han ido disminuyendo un poco por el problema de los dineros que hay en todos lados.
La Universidad no es una isla, recibe y aporta a la sociedad. Hay una corriente a nivel nacional democrática a la cual la Universidad no puede sustraerse. ¿Coincide con eso?
Coincido con eso. No puede sustraerse y su relación con la sociedad tampoco puede quedarse por fuera. La Universidad tiene que transitar con la sociedad, si no, no tendría caso existir.
¿Le falta llegar la 4T a la Universidad?
Yo creo que sí, que le hace falta la 4T. Sería una segunda rectora, pero de la 4T.