CARTA ABIERTA
El primer debate por la gubernatura de Tabasco 2024 cumplió a secas. Tuvo algunos momentos estelares por el intercambio de acusaciones entre Javier May y Juan Manuel Fócil, pero en lo general no pasará a la historia como uno de los más recordados. Lorena Beauregard perdió la oportunidad de arrinconar al Tren, y Minés de la Fuente lució combativa en varios momentos.
El morenista May llegó a cumplir con el guión: mimetizarse con AMLO, imitando incluso las entonaciones de su voz. Acudió a la conocida estrategia basarse en los postulados ideológicos del presidente.
El perredista Juan Manuel Fócil fue, quizá, la gran sorpresa de la noche. Ante las dudas que había sobre la autenticidad de su aspiración, logró asestar varios golpes al Tren que lo movieron de su lugar de confort, tanto que este tuvo que acudir a una acusación personal al recordarle el mote del ‘Rey del Moche’, creado, por cierto, por Adán Augusto.
Con algunas fallas técnicas al inicio de la transmisión televisiva, como fue el retraso de la imagen respecto a la voz de los protagonistas, la producción hizo una transmisión propia de los años sesenta. Muchas tomas personales y muy pocas abiertas que impidieron ver las reacciones de los candidatos. Buena conducción de Marlene Escandón, mostrando autoridad cuando alguno de los abanderados quiso desviarse de las preguntas.
Aunque Javier May mencionó una vez el nombre de Claudia Sheinbaum, evitó caer en los errores que ella cometió en el primer debate presidencial. No se quedó callado ante la mayoría de las críticas recibidas por sus oponentes. Igual citó en varios momentos el nombre del presidente como el gran impulsor de lo que, según dijo, es la transformación del país. Y presumió que las encuestas tengan a su jefe político con el 73% de aprobación en las encuestas.
En un debate donde el tema de la corrupción y la seguridad acapararon los mejores momentos, el Tren se dio tiempo para insistir en varios cambios importantes en su gobierno: 1) la aplicación de la llamada austeridad republicana, 2) la reducción de sueldos a altos funcionarios, 3) el regreso de la elección ciudadana de los delegados municipales, 4) un informe trimestral del estado de las finanzas estatales, 5) reuniones diarias de seguridad rotativas en todos los municipios y 6) su defensa de la refinería de Dos Bocas en cuanto al respeto de los estándares ambientales en su construcción.
La candidata de la alianza PRI-PAN comenzó muy bien, pero luego fue perdiendo gas, dejando pasar la oportunidad de arrinconar al Tren. Si bien cumplió, sus seguidores esperaban mucho más de ella en cuanto a los señalamientos hacia la gestión de May como responsable del Tren Maya, o cuando él insistía en que la corrupción ha disminuido con la 4T.
Y eso que mencionó las 33 denuncias penales que ha hecho por un supuesto desvío de mil 800 millones en la Secretaría de Bienestar. May habla de honestidad, dijo Lorena, pero en el Tren Maya hubo 2 mil 500 millones de desvíos, llegando incluso a reservar la información hasta el año 2027.
La percepción general es que Lorena pudo ser más contundente, sin olvidar el detalle de que jamás mencionó a Xóchitl Gálvez, lo que sí hizo Juan Manuel Fócil al pedir el voto para él y para la abanderada presidencial de Fuerza y Corazón por México.
El perredista Juan Manuel Fócil fue contundente en los ataques directos contra Javier May, lo que sirvió para ponerle pimienta a un debate que por momentos cayó en el lugar común de promesas irrealizables o de los discursos de siempre. Por ejemplo, le reclamó por los malos gobiernos municipales en Comalcalco, diciendo que si su equipo es incapaz de entregar buenos resultados en su feudo, menos lo hará en Tabasco.
Después le reclamó los 243 millones de pesos sin acreditar en el programa Sembrando Vida del que fue responsable como secretario de Bienestar. Habló de la presunta corrupción en el Tren Maya, y del contraste entre su discurso de austeridad y el traslado hecho en sus giras por medio de tres camionetas Suburban. Luego de que May culpó al llamado PRIAN del comienzo de la inseguridad en Tabasco, Fócil le contestó que Morena gobierna ahora y debe hacerse responsable de dar buenos resultados.
Y bueno, Minés de la Fuente hizo su mejor esfuerzo. Lanzó varias críticas a Javier May, como la tala de siete millones de árboles en la construcción del Tren Maya, y lo desmintió en cuanto a que la pobreza ha bajado, enseñando cifras respecto a que Tabasco es el séptimo lugar del país en este renglón.
Aunque combativa, a veces lució nerviosa, trastabillando al leer y dejando valiosos segundos sin usar en sus intervenciones. Luego sucedió algo extraño al pedir el apoyo para una iniciativa del Partido Verde. Luego le dijo a May que debía tener la “lengua muy limpia” para hablar de corrupción, enseñando una imagen con la reprobación de su cuenta pública cuando fue alcalde de Comalcalco.
En resumen, fue un debate sin un claro ganador, en medio de un formato acartonado que deja muy poco espacio para la réplica. Las tomas de la transmisión televisiva no ayudaron mucho, y el breve zipi zape entre May y Fócil le pusieron un poco de pimienta. Lorena dejó pasar una buena oportunidad al tratar quizá con demasiado respeto al Tren, y Minés estuvo ahí dando una batalla digna.
Por cierto, Javier May mostró las encuestas que le dan hasta una ventaja de 60 puntos sobre su más inmediato perseguidor. Sobra decir que llegó a cumplir su papel de favorito, previendo lo que al final sucedió: que todos se fueran sobre él.