Relato Macabro

 

«¡Todo esto lo vi antes!… ¡Estuve aquí en este lugar!… ¡Son las mismas ventanas!… ¡Estas son las mismas personas!… ¿Qué será lo que me pasó?… ¿Por qué me habré adelantado al tiempo?»

 

Muy sorprendido y con la constante duda, Mr. Energy nos concede esta entrevista para narrar una parte de su vida que hace muy poco le sucedió: una historia enigmática y espeluznante que vivió en carne propia, protagonizada por este asombroso personaje que, en muchos casos, se adelanta a los tiempos sin poder prevenir el destino.

 

Este Relato Macabro es muy especial en esta ocasión, porque aunque usted no lo crea, tuvimos la oportunidad de estar presentes en una parte de esta narrativa e impresionante caso que hoy nos ocupa.

 

Mr. Energy, con personalidad propia, ciudadano común y corriente, todo un profesional laboral, discreto y con alto grado de responsabilidad, prefiere no mostrar datos personales por aquello del «qué dirán», sobretodo cuando nos encontramos en un trópico húmedo, donde la gente tiene un especial sentido urbano de lo inverosímil, prefiriendo el camino de la crítica aguda, inclinándose por la burla, los apodos y calificativos soeces… Por eso es lo de «Mr. Energy».

 

Fui contactado por nuestro personaje para tener una breve charla, pero también tuvimos como testigos a dos de sus familiares, a manera de respaldo, credibilidad y confianza en su historia.

 

Entrando en materia, nos comenta Mr. Energy que hace aproximadamente dos meses había estado soñando que estaba en un edificio que no lograba identificar, ni su diseño ni su ubicación, pero que se encontraba en una especie de amplia sala con muchas personas… cuya singular característica eran unas amplias ventanas que daban vista a unas lomas con verdes y bien recortado pasto.

 

Las ventanas llamaban intensamente su atención, y por más que se esforzaba en sus sueños buscando su localización, resultaban vanos sus intentos… no sabía dónde encontrar esas grandes ventanas, asegura nuestro relator.

 

Como estos sueños fueron frecuentes, se vio en la necesidad de comentarlo a su señora madre y a un hermano, pero tampoco pudieron definir el paradero de dichas amplias ventanas.

 

Cada día que se repetían esas revelaciones mientras dormía, al amanecer las comentaba con sus familiares.

 

Debido a esas constantes apariciones de estar en esa sala con esas grandes ventanas, habló muy seriamente con su progenitora y hermano para que estuvieran preparados ante cualquier cosa mala, ante algún imprevisto en el seno familiar… porque definitivamente su energía extrasensorial no le permitía, en este caso, definir esa situación de ver esas ventanas que prácticamente ya conocía al detalle, centímetro a centímetro.

 

Su preocupación iba en aumento, y tal vez para Mr. Energy podría considerarse un caso muy difícil por las dificultades para localizar esas ventanas y estar prevenidos ante tales señales.

 

La incertidumbre de Mr. Energy fue despejada brutalmente cuando una mañana les fue notificado el fallecimiento de su abuelita materna, quien ciertamente estaba enferma, pero no tan grave como para llegar a su deceso.

 

Los familiares se trasladaron a la sede de los servicios funerarios para el acompañamiento fraterno de tan lamentable acontecimiento.

 

Mr. Energy al concurrir a estas instalaciones, tuvo que sacar fuerzas de lo más profundo de su ser para no desmayar por la impactante y espeluznante sorpresa que tuvo al estar en esa sala.

 

¡Ahí estaban esas grandes ventanas!… ¡Síiiii!… ¡Esas ventanas que aparecían en sus sueños!… ¡Con vista a las lomas!… ¡Superficies con pasto o grama bien conservada!… ¡Ese era el lugar tantas veces soñado!

 

Dada la relevancia para este personaje del deceso de su abuelita y no haber podido descifrar la ubicación del lugar, nos pusimos en contacto y en ese mismo escenario soñado, ahí nos contó esa revelación que tuvo mientras dormía. Fueron testigos de tal acontecimiento su señora madre y su hermano, quienes con detalles nos narraron los antecedentes de dichas visiones.

 

Mr. Energy nos mostró de cerca la conformación de dichas ventanas que vio en sus sueños con las que teníamos a la vista.

 

Quienes creen saber de estos fenómenos paranormales consideran que este tipo de revelaciones pudo tratarse de un viaje astral que no llegó a sentir… o también podría haber sido un “deja vu”… ¿usted ya ha tenido una experiencia similar?… ¿Le gustaría experimentar un sueño igual?

Por Juan René Colorado Sosa

Periodista tabasqueño. Iniciador de la crónica parlamentaria en 1978 en Diario Rumbo Nuevo con la columna Tribuna Legislativa, y luego, en 1978, en Diario PRESENTE, donde estuvo hasta 1997. En el Diario PLUMAZO DIGITAL se publican actualmente la Tribuna Legislativa, la columna política PODER Y GLORIA, diariamente la columna GRAFI - CASOS y cuando hay, La Mañanera. Cuenta con el Premio Estatal de Periodismo género CRÓNICA en 1991, y en 1995 en el género REPORTAJE y otros más. Los miércoles publica en el Diario TABASCO HOY los Relatos Macabros, en tanto sus colaboraciones están en las redes sociales Youtube y Facebook.