CARTA ABIERTA
Esta es la pregunta que recorre los pasillos de Morena luego de que Adán Augusto y su hermana Rosalinda López Hernández coincidieran en Villahermosa con motivo de 104 Jornada Nacional del Notariado Mexicano.
En el primer caso, se sabe que el presidente López Obrador ha encartado al secretario de Gobernación como una de sus ‘corcholatas’ en la sucesión presidencial. Y con la administradora general de Auditoría Fiscal Federal del SAT se ha observado un inesperado despegue dentro de las preferencias para la gubernatura.
El arropamiento a Adán en dos actos oficiales, apoyado por el gobernador Carlos Manuel Merino, confirmó lo que se ha observado en sus anteriores visitas al Edén: el entusiasmo de los ciudadanos y de la clase política de Morena a su aspiración. El grito de “¡Adán, amigo, Tabasco está contigo!” se acompañó de muchas personas acercándose para saludarlo, entregarle peticiones o tomarse una selfie. Es decir, el afecto ahí quedó como testigo.
La reaparición de Rosalinda en el Edén, a propósito de la Jornada Nacional del Notariado, también generó múltiples comentarios en diversos frentes. Que se recuerde, fue su primera aparición en público desde que es funcionaria del SAT. Si bien se le había mencionado con discreción como una de las cartas al Gobierno de Tabasco, su reciente estadía reforzó el apoyo de sus simpatizantes, que son muchos, por cierto.
Lo que no pasó inadvertido para nadie, dentro y fuera del círculo de Morena, es la presencia coincidente de Adán y Rosalinda en Tabasco. Es la primera vez en mucho tiempo que ambos aparecen en un mismo evento. Si bien no cruzaron palabra ni aparecieron juntos en una foto, algunos analistas se preguntaron si esta era una señal para lo que se viene electoralmente.
Por lo pronto, uno de los primeros estigmas que ha empezado a borrarse es la posible incorrección política de que Adán fuera el abanderado presidencial y su hermana la candidata a la gubernatura. Un primer paso de Morena y Obrador en ese sentido se dio en Guerrero, cuando Evelyn Salgado Pineda tomó el lugar de su padre Félix Salgado luego de que el INE le tumbara la postulación.
En su forma pragmática del quehacer político, la 4T ha desmitificado las reglas no escritas del pasado que no permitían a familiares cercanos ocupar altos cargos públicos o postularse a un cargo de elección al mismo tiempo. De hecho, en los partidos de oposición hay muchos ejemplos de cómo este proceder ha quedado atrás.
En Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas hizo a su sobrino Christian Castro Bello candidato al Gobierno estatal. Y Carolina Viggiano, esposa del diputado federal Rubén Moreira, es ahora mismo abanderada a la gubernatura de Hidalgo. Son nuevos tiempos de la política en México, aunque en países como Estados Unidos es algo común, tal como lo demostró el clan Bush, con George hijo como candidato presidencial y su hermano Jeff como gobernador de la Florida. Ya nadie se sorprende.
Por ello es que ha generado tanto revuelo la coincidencia y la señal que significaría la estadía de Adán y Rosalinda en Tabasco. Si el secretario de Gobernación llega ser el elegido de Obrador a la ‘grande’, no habrá impedimento para que su hermana Rosalinda aparezca en las boletas.
Suena entendible y hasta lógico, recordando además que la funcionaria SAT tiene un punto extra a su favor respecto al resto de sus competidores internos. En lealtad y disciplina ante Obrador, en 2012 dio un paso al costado para dejar pasar a Arturo Núñez, aun cuando ella superaba a este en las encuestas internas del PRD.
No va en solitario, desde luego. Antes tendrá que superar a otros ‘pesos pesados’ del morenismo: Raúl Ojeda, Javier May, Octavio Romero, Yolanda Osuna, Mónica Fernández, Manuel Rodríguez González y hasta César Burelo. Y no hay que olvidar la voz y el voto que tendrá al respecto el gobernador Merino.