Franja Sur
Por los siglos de los siglos desde que hay elecciones en México el pueblo solo es llamado para votar, pero no es tomado en cuenta en las acciones de gobierno, como la obra pública que se realizan a chaleco, sin consultar si algunas de ellas beneficia o perjudica a la comunidad.
Esa propaganda de que “el pueblo manda, el pueblo pone y el pueblo quita”, solo es eso, propaganda gubernamental, pero la realidad está a la vista de todos.
Y es que vivimos en un planeta de lo absurdo donde, por ejemplo, un ex director de zonas arqueológica puede ser director del principal instituto de salud del país, y un agrónomo puede dirigir los destinos de Pemex, la principal empresa productiva de México, y así.
Estos absurdos también se viven en Tabasco. Veamos: a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), le pidieron una obra en el malecón de la colonia Gaviotas para contener el agua del río Grijalva, para evitar que las corrientes se filtren a las zonas habitadas, no para contener el paso de vehículos por ese lugar.
Pero la Sedatu, al parecer, le dio prioridad a disminuir el tránsito de autos y camionetas en esa colonia de Villahermosa, construyó en dos carriles y, solo dejó un carril donde hoy es un verdadero desastre conducir por esa parte de la capital, situación que tiene a los habitantes y comerciantes de Gaviotas, condenando la dichosa obra del malecón.
Mire usted otro absurdo. Hace más de 15 años que los lugareños del municipio de Cárdenas urgen un nuevo Hospital Regional en esa zona de la Chontalpa, pues con el que cuentan actualmente ya es insuficiente. A los pacientes lo tienen amontonados en los pasillos.
Sin embargo, le dieron prioridad a derrumbar y construir de nuevo el Estadio de Beisbol Centenario 27 de Febrero, cuando “primero está la salud”, este estribillo de la salud continuamente lo suelta en las mañaneras el presidente López Obrador. Estos son solo algunos absurdos del gobierno.
En los casos del hospital y el estadio de beisbol, se debió hacer una consulta popular, tal y como se hizo en Baja California con la fábrica cervecera que cancelaron.
Ahora bien, la terrorífica Sedatu ahora está haciendo la obra en el malecón del centro de Villahermosa. Luego entonces, ante el enorme desorden que causó a los habitantes de Gaviotas, deberían mostrar la maqueta al pueblo, enseñar el proyecto a los ciudadanos de la capital.
Así, entre “pueblo y gobierno”, como dice el repetido eslogan oficial, podrían opinar y tomar un acuerdo conjunto, al menos con una representación de la Zona Luz de Villahermosa, porque si cometen otro error como el de Gaviotas, imagínese. Si hoy el tránsito en la ciudad es complicado, si acotan la avenida será un verdadero infierno.
Ahí se las dejo.