CARTA ABIERTA
Adán Augusto no camina sobre un lecho de rosas en su aspiración presidencial ni en la nominación del candidato a la gubernatura. En un frente tiene al grupo antagónico liderado por Octavio Romero y Javier May. Por el otro aparece su aún frágil popularidad en las encuestas nacionales.
En el primer apartado, Javier May lanzó el grito de guerra cuando ‘destapó’ al director de Pemex como su candidato al Gobierno de Tabasco. Desde entonces se entendió que el director de Fonatur iba a defender su posición política dentro de la sucesión en Tabasco.
La alianza May-Oropeza por la Quinta Grijalva es tan evidente que este último ha dado otro paso para no ponerle las cosas fáciles al secretario de Gobernación. Cuestionado sobre el respaldo que el director de Fonatur le dio para ser candidato de Morena a la gubernatura respondió: «Díganle al señor May que yo lo apoyo a él». Y sobre si le interesa ser el abanderado, el funcionario federal solo sonrió, sin contestar más preguntas.
Por lo que se observa, Oropeza y May han establecido un acuerdo para que uno de los dos sea el candidato. Solo que Adán tiene otros planes. Al secretario de Gobernación le interesa apoyar, en primer lugar, a su hermana Rosalinda. Pero si esto no fuera posible por distintas circunstancias, están las cartas de Raúl Ojeda, Yolanda Osuna, Mario Llergo, Enrique Priego y César Burelo. Y tampoco le desagradaría decantarse por Manuel Rodríguez.
El tema luce complejo porque hay quienes dicen: “Si Adán es el candidato presidencial, Obrador tomará en sus manos la sucesión en Tabasco para tener un equilibrio de poderes”. Por otro lado, se asegura que si el notario público no es el abanderado entonces tendrá el derecho y la libertad de apoyar a su hermana. Sin embargo, hay una tercera lectura: si Adán es presidenciable tendrá todo el poder de decisión para influir en el Edén. Todo.
En cualquier caso, y previendo estos escenarios, es que Javier May y Octavio Romero han unido fuerzas para mostrarse como un contrapeso al enorme poder que ahora tiene el huésped del Palacio de Cobián.
Si bien ese es un frente que atrae su atención, López Hernández tiene otro pendiente: hacer crecer su popularidad en las encuestas nacionales.
Recién se dio a conocer el resultado de la encuesta de CE Research que pondera la popularidad de las y los presidenciables (https://www.infobae.com/america/mexico/2022/06/15/elecciones-2024-monreal-y-norona-rebasan-en-popularidad-a-una-de-las-tres-corcholatas-de-amlo/). Ahí aparece la posición de quienes podrían suceder a Obrador. A pesar del apoyo de AMLO para promover a sus tres favoritos (Sheinbaum, Ebrard y Adán), Gerardo Fernández Noroña y Ricardo Monreal tienen más intención del voto que el secretario de Gobernación.
CE Research explica que Adán Augusto cuenta con una aprobación popular del 7%, mientras que la de Noroña es del 8% y la de Monreal es del 11 por ciento. Sin embargo, los punteros siguen siendo Marcelo Ebrard con el 39% de la popularidad, y Claudia Sheinbaum, con el 35%.
En este entendido, Adán Augusto tiene la titánica labor de darse a conocer más fuertemente en todo el país. Esta es la razón por la que Obrador lo ha enviado a distintas partes de la república.
Por eso realizó la gira por la revocación de mandato y acudió al reciente mitin de la unidad en Toluca. Pero también ha venido inaugurando obras en varias entidades, como lo hizo el pasado fin de semana con la planta Sisal Hilos Yucatán, donde estuvo con el mandatario panista Mauricio Vila Dosal.
Estos son los dos retos que Adán enfrenta y que debe resolver en los próximos meses: crecer en aceptación de la militancia nacional y no dejar suelta la sucesión en Tabasco. No son poca cosa dentro de su proyecto político a largo plazo.