De Primera Mano
Jorge Villa Alcalá, uno de los actores destacados en la edad de oro del periodismo mexicano de los setenta, fue quien me sugirió iniciar una columna periodística.
Austero en su hablar y con una mirada poco amigable, Villa era subdirector de NovedadesdeTabasco, pero en los hechos estaba al frente del diario local de la cadena de ese nombre. Era principios de 2000, yo tenía 35 años de edad y no tenía contemplado pergeñar una columna, pues apenas llevaba yo 13 años de reportero y era de la idea que el género de opinión debe ser el final de una carrera.
Hoy con 36 años en el oficio, 23 los he dedicado a De Primera Mano, pero sin descuidar la reporteada de a pie, que inicié en 1987 en Novedades, conducido entonces por Ruy González Brito, uno de los mejores periodistas y jefes que he conocido.
A mediados de los ochenta, Novedades no contrataba a reporteros que ya ejercían en el estado, por un tema que tenía que ver con una rivalidad con el diario Presente.
Cuando Novedades me contrató, en la manada de aspirantes a reporteros que esperaron al siguiente curso estaban mis compañeros Carlos Antonio Marí Vázquez y Rafael Núñez Martin, hermano de Jorge, quien era jefe información de Presente y con quien libré una competencia sin par por ganar la nota de ocho columnas.
Volviendo a De Primera Mano, don Jorge VIlla me sugirió sacarla, cuando ingresé por segunda vez a Novedades, a invitación de su director general, Federico Bracamontes hijo.
De Primera Mano apareció tres veces por semana en sus inicios, hasta volverse diaria.
Años después migró a ElHeraldodeTabasco, y hoy fue acogida en ElIndependiente, el diario nacional de reciente aparición que dirige el gran Carlos Ramírez, uno de los mejores columnistas de México y considerado el heredero de Manuel Buendía Tellezgirón.