CARTA ABIERTA
1. La más obvia: viene a pelear la candidatura de Morena a la gubernatura. Aunque es un barón muy cercano al secretario de Gobernación, lo cierto es que aparece muy abajo en las encuestas de opinión. Cuando se le mide con sus competidores, es ampliamente rebasado.
2. Al pedir licencia como diputado federal, ve la oportunidad de empezar a trabajar a ras de tierra a fin de hacer crecer su presencia entre los ciudadanos y la militancia. Mario Llergo Latournarie siente que ahora tendrá la libertad de hacer una especie de campaña adelantada, ya sin las ataduras de su espacio en San Lázaro.
3. Pero si él no es el ‘bueno’ para Tabasco en 2024, entonces viene como una especie de operador político de Adán Augusto. En el marco de la especulación periodística, Llergo tendría la misión de ir preparando el terreno para el candidato o candidata. Su tarea será tejer acuerdos, las alianzas necesarias para que el abanderado del partido guinda transite sin algún obstáculo interno o externo.
4. Llega a Tabasco a servir como dique de contención al llamado ‘Grupo May’, la formación liderada por el responsable del Tren Maya y que tiene como misión hacerlo candidato y gobernador de Tabasco. Es posible que Adán haya visto la incompetencia de la dirigente morenista Tey Mollinedo, por lo que siente necesario arrimarle un refuerzo.
5. Como el ‘Grupo May’ está creando una estructura paralela con los comités municipales que respaldan las candidaturas de Claudia Sheinbaum y Javier May, la tarea de Mario Llergo sería: 1) Reforzar la dirigencia de Tey Mollinedo y Raúl Ojeda o 2) Crear su propia superestructura alterna para contrarrestar el avance de la corriente del director de Fonatur, a la que igual pertenecen Pepín López Obrador y Octavio Romero Oropeza.
6. Otra responsabilidad de Llergo puede ser ayudar a Mario Delgado, afín a Adán, en la tarea de pulverizar los acuerdos aliancistas entre el PRD, PRI y PAN. Como se sabe, estas siglas están concentradas en unir fuerzas para plantarle cara a Morena en el ámbito nacional y local. Aquí es donde el exdiputado federal estaría enfocado: evitar que esa coalición aterrice y que pueda tener una mayor presencia en el Congreso local tras los resultados electorales.
7. Sumar más adeptos. Como se sabe, Llergo ha sido uno de los artífices en la adhesión de varios expriistas tabasqueños al partido gobernante. En la idea de debilitar aún más al PRD y al PRI, el expriista buscaría generar una nueva desbandada para cavar la tumba definitiva de ambos partidos. Varios priistas están ya con un pie en Morena o en el PVEM. Sólo esperan el momento oportuno a fin de no ser blancos del escarnio público, sabiendo de antemano que les lloverá un alud de críticas por su arribismo.
8. Mario Llergo ha dejado la diputación federal porque, simplemente, quiere ser candidato a la alcaldía de Centro. Como sabe que sus números son insuficientes para la ‘grande’, se conformaría con ser alcalde de la capital. Su objetivo radica en seguir vigente y, quién sabe, postularse a la gubernatura en 2030.
9. Aunque parece poco probable, estaría destinado a crear la estructura electoral para el candidato presidencial. Desde Tabasco, sería responsable de la operatividad política en varios estados del sureste. Desde luego, el Plan A es que ese abanderado sea Adán Augusto. Pero si este no lo fuera, ahí estaría Llergo para respaldar a Claudia Sheinbaum. El truco consiste en arrebatarle esta gestión al ‘Grupo May’.
10. La última hipótesis radicaría en un problema de salud, o incluso familiar, que le estaría orillando a dejar la actividad política. Este es, desde luego, el más débil de los argumentos que explicarían su solicitud de licencia a la diputación federal. Pero en política, ningún escenario debe descartarse.