El Tutupiche
Desde que el Doctor Ariel Enrique Cetina Bertruy dejó la dirección general del Instituto de Formación para el Trabajo (Ifortab), para ‘ausentarse de los reflectores de la política’, por espacio de un poco más de un año, muchos ‘lo dieron por muerto’.
Pero muy pocos recuerdan que ‘del panteón de la polaca’, ‘los muertos que vos matáis, siempre gozan de buena salud’, como bien dijo Juan Ruiz de Alarcón en ‘La verdad Sospechosa’, y no José Zorrilla, en ‘Don Juan Tenorio’.
Y así, desde hace tres meses de que fue nombrado como nuevo Rector de la Universidad Popular de la Chontalpa (UPCH), empezó a brotar una especie de comezón entre sus detractores, a tal grado que llegaron a ventilar en redes sociales que el Doctor Cetina Bertruy no cuenta con cédula profesional.
La realidad es que todo se debe a un error en el portal del registro de profesiones de la Secretaría de Educación, específicamente en una letra del segundo apellido del Médico Cirujano egresado de la UJAT en 1991 con la cédula profesional 1616522.
Mientras que el también postgraduado en Medicina Familiar por el IMSS, Maestro y Doctor en Filosofía por la Universidad de la Habana, Cuba, está inmerso de tiempo completo en sacar adelante a la Universidad Popular de la Chontalpa, al parecer sus enemigos están nerviosos y lanzan ese falso dardo envenenado de amargura.
¿Qué preocupación les causa Ariel Cetina Bertruy? ¿Temen que vuelva a tomar fuerza con su agrupación Sociedad en la Acción? ¿Les incomoda que sea muy cercano al secretario de gobernación Adán Augusto López Hernández y al gobernador Carlos Manuel Merino Campos? ¿Estropea las aspiraciones de alguien o varios que desean la alcaldía de Centro u otro cargo de relevancia?
Tal vez nunca lo sabremos, lo que sí sabemos es que el regreso de Cetina Bertruy los ha puesto a temblar.