CARTA ABIERTA
Hasta un niño de pecho tiene más inteligencia y sentido común que quienes están tramando ahora mismo el cese de Dagoberto Lara en la dirigencia del PRI en Tabasco. La grave noticia para los intereses del partido es que si este pequeño grupo se sale con la suya, estará logrando lo impensable: la pérdida del registro ante la autoridad electoral, lo que implica su extinción definitiva de la faz del Edén.
Los instigadores de este golpe de Estado en 16 de Septiembre tienen como contrapeso a un grupo fuerte que no está de acuerdo con la salida de Dagoberto Lara. Esta corriente de gente respetable y respetada es encabezada por el exgobernador Andrés Granier y su hijo Fabián, a quienes se añaden el exlíder partidista Freddy Chablé Torrano, el exfiscal del Estado, Rafael González Lastra, y los también exdirigentes Rodolfo Jiménez Damasco, Pedro Gutiérrez y Gina Trujillo.
Es decir, mientras los golpistas buscan destituir a Dagoberto, Granier y Freddy Chablé buscan su permanencia por la sencilla razón de que sería catastrófico cambiar de mando cuando sólo faltan cerca de veinte días para el inicio oficial de las campañas.
El grupo faccioso busca eliminar a Dagoberto, descontento porque el ganadero no se ha ceñido a sus intereses particulares. Por eso lo han ido a acusar con Alejandro Moreno Cárdenas, para que se los quite del camino.
Sabedores de semejante estercolero, Andrés Granier y su hijo Fabián han dejado saber que si el presidente del PRI es removido, ellos no meterán las manos a favor del partido en las campañas. Esto sería una auténtica tragedia para el tricolor, porque tan sólo el Químico y Fabián lograron casi tres cuartas partes de la votación de 2021 en todo el estado.
Por si el delegado nacional Alonso Pacheco no se había dado cuenta, en el más reciente evento de Xóchitl en Villahermosa, en el salón Candiles, el exgobernador se llevó el ‘aplausómetro’ cuando la candidata presidencial opositora mencionó su nombre. Ni un otro priista se llevó tal reconocimiento de los asistentes, confirmando el respaldo a ras de tierra que siguen manteniendo el Químico y su hijo Fabián.
La cuestión es que si ‘Alito’ cede a los chantajes del grupo golpista, estará dando por sentada la muerte del tricolor en tierras del presidente López Obrador. Porque nadie le cree su argumento de que el periodo de Dagoberto ha terminado y que, por lo mismo, el cambio es obligado en Tabasco y cuatro estados más del país. Pero, ¿desde cuándo el CEN es tan exigente en estas cuestiones de estatutos si son incontables las veces en que un presidente de partido ha permanecido en el cargo cuando hay procesos electorales en marcha?
Lo dicho: si Dagoberto es quitado a la mala, que se vayan olvidando del respaldo electoral del Químico y Fabián. En este escenario, estaría dándose la muerte anticipada de unas siglas que gobernaron por más de setenta años en Tabasco.
Esta es la encrucijada actual en 16 de Septiembre: un grupo belicoso que matará a su propio partido, y otra corriente a favor de mantener la estabilidad y la sobrevivencia en pleno proceso electoral.
Pobre PRI, apenas puede sostenerse en pie y algunos insisten en quitarle el tanque de oxígeno para hundirlo de una buena vez. Quizá eso es lo que quieren por debajo del agua, para darle gusto a alguien muy poderoso en el centro del país. Por eso está el partido como está, hundido en un estercolero.
: LA RÚBRICA:
Pasó lo que tenía que pasar: morenistas le cerraron las puertas al “gordito” para ser integrante de la alianza con Morena, esto después de que el eterno dirigente del PT, Martín Palacios, propusiera al exmandatario priista Manuel Andrade para aparecer en las boletas bajo estas siglas. De acuerdo a la información publicada en un diario local, el diputado local de Morena Jesús Selván García, recordó que Andrade reprimió al movimiento durante su gestión y por lo tanto no ve congruencia en esa idea. Aseguró que el Partido del Trabajo tiene mayores oportunidades colocando a sus líderes municipales al frente, líderes que no cuenten con señalamientos en su contra y tengan la aprobación del pueblo. Otro que protestó fue Rafael Sánchez Cabrales, ya que dijo que MAD crítica siempre al presidente Andrés Manuel López Obrador y su administración. Agregó que Andrade no comparte los ideales de la 4T. Más: la diputada local Isabel Yazmín Orueta Hernández señaló que si Manuel Andrade va o viene no alteraría en nada el triunfo de Morena para la gubernatura. Por lo que se ve, existe un repudio total dentro del morenismo tabasqueño ante la sola idea de tenerlo como aliado. Por lo demás, habría que analizar qué tipos de bebidas toma el dirigente del PT en Tabasco. Con seguridad no es agua ni refresco.