CARTA ABIERTA
Ha sido un salomónico empate en las cuerdas entre Adán Augusto y Javier May. Tres candidatos a diputados federales de Morena por Tabasco pertenecen a la cuadra del exsecretario de Gobernación y tres son afines al próximo gobernador de Tabasco.
En la lista publicada por la dirigencia nacional de Morena están tres adancistas: el alcalde de Macuspana, Julio Gutiérrez Bocanegra, en el Distrito 01 con cabecera en ese municipio. Jaime Lastra Bastar, diputado local y presidente de la Jucopo, aparece en el 04 de Centro. En el Distrito 06, también de Centro, está la dirigente del partido con licencia, Tey Mollinedo.
En la otra esquina, la de May, están: el desconocido exfuncionario municipal Iván Peña Vidal por el Distrito 02 con sede en Cárdenas, mientras que en el 03, con sede en Comalcalco, la afortunada fue la exalcaldesa Rosa Graniel Zenteno. En la demarcación 05 de Paraíso se optó por la exdiputada local, Beatriz Milland Pérez.
La repartición de candidaturas entre Adán Augusto y Javier May confirma lo que se ha venido diciendo en esta columna: entre ambos hay una serie de acuerdos políticos de alto nivel que han venido cumpliéndose, teniendo el aval del presidente López Obrador.
Y como muestra de que Adán ni andaba muerto ni andaba de parranda lo demuestra la reciente postulación de su hermana Rosalinda en la primera fórmula al Senado, y las reelecciones de Enrique Priego en el Poder Judicial y Guillermo Narváez en la UJAT, mientras que Nicolás Bautista Ovando sigue inamovible en la Fiscalía en un periodo que terminará hasta la mitad del próximo sexenio.
Los acuerdos políticos han tenido como testigo al gobernador Carlos Manuel Merino y estos se ampliarán en la designación de los candidatos a las diecisiete alcaldías y las diputaciones faltantes en lo federal y lo local.
Contrario a lo que ansiaban los enemigos de Adán Augusto, López Obrador ha evitado descobijar a su ‘hermano’, abriéndole la puerta para mantener vigente su corriente interna en Tabasco. El movimiento del presidente no es casual, porque lo necesitará como su representante en el liderazgo del Senado y qué mejor guiño que darle espacios a sus afines en el Edén.
En paralelo, Javier May ha entendido la coyuntura política que se avecina con AMLO fuera del poder y por esta razón no ha caído en la tentación de oponerse a los designios de su jefe político. Con mucho de inteligencia, el próximo gobernador está viendo el conjunto del bosque y no sólo el árbol, sabiendo lo importante que es blindar la salida del inquilino de Palacio Nacional.
Los acuerdos Adán-May se centran en cuidar la unidad del partido en Tabasco, sabiendo que así apoyan al mesías en el regreso a su tierra, desde donde mantendrá su vigencia política. El mayor sacrificio, desde luego, está corriendo a manos del Tren, porque sus afines le pedían llevarse todo el pastel, dejando el resto a quien es su principal adversario interno y a quien tanto critican.
Los pactos May-Adán están callando la boca a quienes han fabricado la historia de una ruptura, una pugna anunciada. Ni lo uno ni lo otro. Con mucho de inteligencia política, el Tigre May ha evitado caer, al menos por ahora, en la tentación de avasallar al contrincante. May envía así un mensaje de civilidad a Claudia Sheinbaum, dando muestras de ser un político abierto al diálogo y los acuerdos; en fin, se muestra dispuesto a no crearle problemas en la tierra del presidente.
Por cierto, falta que los candidatos morenistas ganen sus respectivos distritos. Viendo el vaso medio vacío, tres de ellos están en riesgo de perderse. A leguas se ve cuáles.
: LA RÚBRICA
La designación de los seis candidatos federales morenistas ha tenido sus claroscuros, como lo muestra la marginación de Manuel Rodríguez González, quien iba por su segunda reelección consecutiva en el Distrito 04. Aunque el presidente de la Comisión de Energía había hecho méritos de sobra para repetir en San Lázaro, al final los acuerdos optaron por Jaime Lastra. Sin menospreciar los atributos del presidente de la Jucopo, está claro que Rodríguez tiene mucho mayor capacidad legislativa de alto nivel, apuntalada en favor de las reformas del presidente en materia eléctrica. Es más, se le pudo haber situado en el Distrito 06, dado finalmente a una grisácea Tey Mollinedo, pero eso tampoco sucedió. Es seguro que algo mucho mejor le espera en el próximo periodo presidencial. Por ahora está concentrado en su misión de ser el representante de Claudia Sheinbaum en Oaxaca. Algo positivo para Rodríguez: mostró que su compromiso institucional está con el partido y no con un grupo local de poder interno.