CARTA ABIERTA
En un contexto donde la seguridad es uno de los temas más apremiantes para los tabasqueños, el gobernador Carlos Manuel Merino ha enfrentado un panorama complejo marcado por el incremento de delitos debido a los choques internos en la organización criminal conocida como «La Barredora».
En una entrevista en Telereportaje, Merino ha hecho un balance de la situación, destacando tanto los desafíos como los esfuerzos que su administración realiza para proteger a los tabasqueños.
Reconoce que los enfrentamientos internos dentro de «La Barredora» han sido un factor significativo en el aumento de delitos en el primer semestre del año. Estos conflictos han llevado a una ola de homicidios y a la aparición de células delictivas en varios municipios. Esta situación no solo refleja la violencia inherente a las disputas criminales, sino también la fragilidad de la seguridad en la región cuando estos grupos están en conflicto.
A pesar del alarmante aumento en los crímenes, Merino subraya que Tabasco muestra una tendencia a la baja en la tasa de homicidios y otros delitos. Actualmente, el estado se encuentra en el lugar número 15 a nivel nacional, por debajo de la media. Este dato es crucial, pues sugiere que, a pesar de los problemas internos en «La Barredora» y la posible presencia de otros grupos criminales, las acciones del gobierno estatal están comenzando a rendir frutos.
Otro aspecto que el mandatario morenista abordó es la preocupación por la desaparición de jóvenes, un problema que ha afectado gravemente a otras regiones del país. Rechazó la idea de que las organizaciones delictivas estén reclutando masivamente a jóvenes. Reconoció que existen casos de desaparecidos, aunque subrayó que algunos de estos se deben a decisiones voluntarias. En este sentido, destacó que Tabasco se encuentra entre los estados con menos personas desaparecidas, una realidad que aporta cierta tranquilidad en un contexto tan perturbador.
La detención de presuntos integrantes de «La Barredora» en Jonuta, uno de los cuales se creyó familiar del presidente municipal morenista Erick Garrido, fue otro tema delicado. Enfatizó que no se deben hacer asociaciones precipitadas basadas en apellidos y reiteró que cualquier persona que cometa crímenes deberá enfrentar la justicia, sin importar sus vínculos familiares.
Y bien, la situación de seguridad en Tabasco es un reflejo de los complejos desafíos que enfrentan muchas regiones del país. Los esfuerzos del gobernador por frenar el aumento de delitos provocado por los conflictos internos de «La Barredora» y por mantener una tendencia a la baja en los índices de criminalidad están a la vista.
Además, su postura firme ante las desapariciones y la aplicación de la justicia refuerza su compromiso con la seguridad de los ciudadanos. Aunque el camino hacia la completa estabilidad es largo y arduo, las acciones de su Gobierno muestran un compromiso decidido por mejorar la situación y proteger a los tabasqueños.
: LA RÚBRICA
Claudia Sheinbaum dio a conocer la tercera parte de su gabinete, donde llaman la atención para Tabasco los nombres del secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, y el titular de Salud, David Kershenobich Stalnikowitz. Como se recuerda, el gobernador electo, Javier May, dejó vacantes estas Secretarías en su gabinete hasta conocerse los nombres de los titulares federales, lo que el jueves sucedió. Por eso es que a partir de ayer se comenzaron a barajar los nombres de los posibles titulares en Tabasco, donde es muy posible que destaquen los que tengan alguna relación con ellos. Lo cierto es que en Salud quien lleva ventaja es la directora de la División Académica de Ciencias de la Salud, Miriam Carolina Martínez López, muy identificada con Javier May. En Seguridad, es muy posible que se nombre a un destacado elemento del Ejército Mexicano… Ahora que se habla tanto de un gabinete de izquierda para el próximo sexenio encabezado por May, muchos piensan en el exdirigente perredista Roberto Romero del Valle, uno de los iniciadores del movimiento obradorista en Tabasco. Si se rescató a Darvin González Ballina como un personaje clave en esa lucha de los ochentas, parece que también debería contemplarse la inclusión de Romero del Valle, un izquierdista de pies a cabeza.