CHAPALEO
HACE POCO más de cuatro semanas doña Claudia Sheinbaum Pardo, en su toma de protesta me dijo, clarito, “entregaré mi conocimiento, mi alma, mi vida y lo mejor de mí misma por el bienestar del pueblo de México” y agregó “me comprometo a no mentir, a no robar y a no traicionar”.
EN muy poco tiempo han sucedido cosas importantes en la vida política de nuestro país, una de ellas es la aprobación de reformas a la Carta Magna, de la que doña Claudia dijo “fue un buen día porque ganó el pueblo de México, este fallo refleja un avance hacia la consolidación de un poder judicial más accesible y participativo y representa la victoria en la que la razón y la cordura triunfan frente a la irracionalidad”.
MAS ADELANTE hizo comentarios acerca del nepotismo en el poder judicial, señalando que al menos 500 jueces y magistrados tienen familiares trabajando en tribunales y juzgados. “Que no se nos olvide -pidió-, la reforma al Poder Judicial es contra la corrupción y los privilegios”.
POSTERIOR A esto saltaron a la palestra voces de descontento, como la de la consejera de la Judicatura Federal, Magistrada Lilia Mónica López Benítez, que renunció a su cargo argumentando que las condiciones actuales no le permiten impartir justicia con independencia, “la justicia, afirmó, no puede estar condicionada a intereses políticos” y aparte comentó que esta reforma afectará a más de 55 mil personas que laboran en el Consejo de la Judicatura.
HAY MUCHAS voces en pro y en contra, del ámbito político y privado que, de alguna manera, con esta reforma ven afectados sus intereses; pero a la mayoría de los mexicanos, los que no sabemos de leyes, nos están haciendo creer que nuestro país viene en picada y que pronto caeremos en situaciones sociales difíciles como Venezuela, por ejemplo.
ES IMPORTANTE que se abra una serie de conferencias, pláticas, mesas redondas, mensajes en los canales de televisión, estaciones de radio y en las mismas redes sociales, que expliquen al ciudadano la razón de estos ajustes a nuestra constitución y hacia dónde nos dirigimos, porque es muy poco el tiempo para empezar a dudar; sigo creyendo en nuestra presidenta Claudia Sheinbaum Pardo en que no nos va a mentir, ni a robar y mucho menos a traicionar.
Y ES que hay una buena razón, los neófitos como yo, claro es un ejemplo, no generalizo, vemos pasar los piedrazos y solo nos agachamos para que no nos golpeen y esto pues provoca miedito; los que saben defienden sus intereses, pero ¿y los que no?
Y CLARO que hay más, mucho más, pero por hoy me voy, no sin antes platicarles que tan pronto anunció el gobernador Javier May Rodríguez “vamos al rescate del sector cacaotero” y habló del proyecto para sembrar 50 mil hectáreas de este grano, de la construcción de una planta para industrializar inicialmente 500 toneladas y con un precio de garantía de 220 pesos el kilo, de inmediato pararon la oreja aquellos viejos líderes cacaoteros de triste recuerdo, no sé por qué . . . .