CARTA ABIERTA
A la vieja usanza, el presidente nacional de Morena, Mario Delgado, estaría en la vía del “dedazo” para elegir al candidato a la alcaldía de Centro. Ante ello, los militantes siguen sin entender la necesidad de poner en riesgo el gobierno de Adán Augusto y la imagen del presidente Obrador ante un posible triunfo de la oposición.
Si bien el CEN no ha informado de manera oficial cuál será el método empleado en la designación, se teme que no sean los militantes, por medio de una encuesta, quienes tengan voz y voto para elegir al candidato.
Se sabe, eso sí, que el dirigente estatal de Morena, Pedro Hernández Jiménez, asumirá la conducción del proceso y por ello ha pedido respeto para el sentir de la militancia, así como a las decisiones del CEN. Lo que se escucha en ‘radio pasillo’ de Morena es una negativa total a candidatos que se elijan desde arriba, tal como lo hizo el PRI durante décadas.
Los barones del partido han advertido su rechazo a “más de lo mismo”, algo que se vivió en la llamada “mafia del poder” y que tenía como una de sus características elegir a los candidatos sin tener en cuenta a los aspirantes respaldados por las bases.
Ninguno de los tres aspirantes a la alcaldía de Centro ha recibido alguna señal sobre quién es “el bueno” y esto no ha hecho sino fomentar las especulaciones. Madian de los Santos, Yolanda Osuna y Jesús Alí han respetado los tiempos del partido, aunque se conoce que este último es quien cuenta con la mayor aceptación ciudadana y la más sólida formación política.
El juego sucesorio se ha abierto en la capital de Tabasco con una demanda clara de los militantes: la aplicación de la encuesta como forma transparente y democrática para descubrir cuál de los tres aspirantes cuenta con el mayor respaldo del electorado.
El destape morenista se ha agitado luego de correrse la versión de que no se postulará al candidato más fuerte, sino al que se acomode a ciertas expectativas. Se estaría buscando una candidata “a modo” que, ya en el cargo, no signifique un obstáculo para los aspirantes a la gubernatura en 2024.
El destape se dará a fines de enero pero desde ahora se está poniendo a prueba la solidez del cambio democrático prometido por Delgado.
Aunque cualquiera puede ser candidato, los números dicen que el que decide es el electorado y este ha colocado arriba de las preferencias generales al priísta Andrés Granier. Y es que enfrentarlo con un candidato débil es darle la espalda a la lógica política más elemental. El señor Delgado está a tiempo de rectificar.
: SE DESENTUME
El que ha vuelto a dar señales de vida es el operador político Vicente Morales López. Cuidando todas las medidas recomendadas en los tiempos del COVID-19, ha empezado a recorrer los municipios de Tabasco a fin de aceitar su equipo político-electoral.
La estructura del exdirector del INJUDET es una de las más sólidas de Tabasco y por lo mismo dará mucho de qué hablar en los comicios de este año. Sin prisa y sin pausa, Vicente Morales sigue sin olvidar lo importante de escuchar a los ciudadanos tabasqueños.
A su favor juega algo que siempre lo ha caracterizado: la fama de ecuanimidad y saber leer los tiempos políticos, algo que pocos saben hacer en el Edén.
: VA QUE VA
En las últimas horas corrió la versión de que el químico Granier no dejará solo a su hijo Fabián Granier, quien competirá por una diputación local en el Distrito Electoral 06. En cristiano, esto significa que ha tomado la difícil decisión de ir por la alcaldía de Villahermosa.