LA AGENDA EN RED
El día de ayer, el mundo se volcó en las principales cadenas de televisión para conocer el mensaje del nuevo presidente del país todavía más poderoso del mundo, Los Estados Unidos. Joe Biden es el presidente número 64 del vecino del norte y México no podía sustraerse a este acontecimiento.
Por lo pronto de las 17 nuevas iniciativas firmadas ayer por la noche, hubo tres que impacta directamente a nuestro país. Los migrantes, la suspensión de la construcción del muro y los llamados “dreamers”.
Todo ello para muchos fue una noticia que alivió a los cientos de miles de migrantes que están en ese país. Los más de 700 mil jóvenes llamados “soñadores” que estaban en el filo de la navaja porque estaban sujetos a ser enviados a México. Todos ellos hijos de migrantes que estudian y trabajan desde que nacieron allá.
Las palabras de los migrantes entrevistados por los medios de comunicación nos dice mucho: “Nos regresaron la esperanza” dijeron sobre la llegada de Joe Biden
Y esto es lo que desde ayer ponderan migrantes en México sobre la presidencia de Joe Biden y la nueva política migratoria.
Desde el primer día de mandato del nuevo presidente Joe Biden se observó el cambio de las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos, y porque no decirlo, simplemente se regresó a las mismas que tuvo el gobierno de Barak Obama.
Estas declaraciones provienen de migrantes que están a la espera en México de sus trámites para radicarse en Estados Unidos. Ellos confiaron que el nuevo presidente de ese país, Joe Biden, flexibilizará su política tras las duras medidas del gobierno del hoy expresidente, Donald Trump.
El tema de la migración fue parte central durante el gobierno de Trump, quien dentro de sus absurdos fueron las medidas polémicas que ordenó como la separación de miles de familias de migrantes indocumentados o la construcción de un muro en la frontera con México, de casi 3.200 km.
Bajo el gobierno de Trump, Estados Unidos envió a México a unos 60.000 migrantes, la gran mayoría de ellos de Centroamérica, en el marco del programa «Quédate en México». Una carga onerosa y costosa para el gobierno de nuestro país.
Esa política ordena que los solicitantes de asilo que llegan a la frontera sur estadounidense deben esperar en territorio mexicano la resolución de sus casos. En este caso los cientos de centroamericanos que aún esperan en nuestra frontera poder pasar a los EU.
El otro tema que volvió a poner en orden las cosas, Joe Biden firmó ayer un decreto ordenando poner un alto al muro, obra que por contratos firmado con antelación está obligados a terminar, pero al termino de esto, ya no se harán más contratos para continuar construyendo más tramos de esta absurda barda.
El decreto de los soñadores va a permitir a que se realice la naturalización de unos 700.000 jóvenes que llegaron como indocumentados en su infancia acompañando a sus padres.
Estas buenas noticias traen tranquilidad a gran parte de nuestra nación, debido al mensaje que externo en su toma de protesta. Hay confianza en el gobierno de México la llegada de Joe Biden y sus políticas al exterior. Las opiniones de la oposición no tienen gran validez porque están politizadas y no admiten que la relación de estos dos presidentes López Obrador y Biden será excelente.