CARTA ABIERTA
Por las razones que cualquiera guste y mande, en ‘radio pasillo’ del PRI en Tabasco hay la impresión de que su dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, ha dejado el partido al garete, sin la menor intención de ganar en la tierra del presidente Obrador.
Hay muchos motivos para pensar en ese sentido, entre ellos, por supuesto, la sorpresiva inscripción de doña Gloria Medina, una ilustre desconocida, en el Distrito Electoral Federal 01. Hasta ese momento, se daba por cierto que Erubiel Alonso sería el abanderado para pelearle esa demarcación al morenista Marcos Rosendo Medina Filigrana.
No fue así, y ‘Alito’ y Dagoberto acordaron dejarle la vía libre al exsecretario de Gobierno, quien ahora luce como amplio favorito para llevarse ese Distrito ante la señora Medina. Hay que decir, por cierto, que Erubiel Alonso, actual delegado del PRI en Campeche, tampoco hizo algún esfuerzo visible para postularse. Como amigo de ‘Alito’ no hizo sino agachar la cabeza con la esperanza de una postulación a diputado federal plurinominal.
El caso es que el registro de doña Gloria dejó también como damnificada a la diputada federal Soraya Pérez Munguía, una abierta opositora al Gobierno morenista. En efecto, en los acuerdos de la alianza federal PAN-PRI-PRD en Tabasco al tricolor le correspondió un Distrito, al blanquiazul otro más y al Sol Azteca cuatro. Es decir, el Revolucionario ya ha ocupado la cuota de mayoría relativa que le correspondía y no hay espacio para otro más.
La intención de Soraya era competir por la reelección en el Distrito 02 (que comprende Cárdenas y Huimanguillo). Sin embargo, esa oportunidad se le ha esfumado y ahora le quedan tres opciones: la alcaldía de Cárdenas, una pluri federal o una pluri local. Sin embargo, gente de su entorno asegura que ella tampoco será candidata a la presidencia municipal.
Otra extraña maniobra del PRI ha sido posponer el registro de los candidatos a las alcaldías. Previsto para el domingo 24, se ha corrido hasta el 14 de febrero. Como se escribió ayer en este espacio, Andrés Granier se perfila como el claro favorito para el municipio de Centro, pero parece que la dirigencia se ha encargado de ponerle todos los obstáculos para que no sea así. La treta parece estar encaminada a desgastarlo en lo interno y en el exterior. Y es que en 20 días pueden pasar muchas cosas.
De todo ello, por supuesto, el menos culpable es Morena. Como partido en el poder, se entiende que haga todos los movimientos estratégicos para ganar de nuevo en la tierra del presidente Obrador.
En todo caso, habría que destacar el talento político del gobernador Adán Augusto y del dirigente estatal Pedro Hernández Jiménez. Si se han logrado armar las piezas del rompecabezas político para repetir la victoria de 2018 no queda sino ponerse de pie y darle ese crédito al mandatario estatal, sabiendo que la política de alto nivel trasciende a pesar de todos los obstáculos. El objetivo es ganar.
En el PRI el cantar es otro. Porque aquí hay la impresión de que el CEN, ‘Alito’, ha dado la plaza por perdida de antemano, sabiendo que no puede batir a Morena. Quizá ha entendido que es mejor dirigir sus esfuerzos a otros estados donde habrá elecciones en junio. También es justo decir que el menos culpable de todo esto es el presidente estatal, Dagoberto Lara. Porque no tiene más opción que recibir órdenes desde arriba. En todo caso lo más honesto para su carrera política sería hablar con la verdad a la militancia y decirle que la votación de este año está perdida. Si esto no es cierto, el partido está obligado a enviar una señal contundente en el sentido opuesto.