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En época de elecciones, los partidos y sus candidatos deben luchar contra traiciones, sabotajes, ingratitudes.
No son pocas las historias de todos los colores.
En Centla, por ejemplo, el PRI y sus candidatos enfrentan a militantes resentidos como José Ángel Vasconcelos López, delegado estatal de Infonavit, a quien se le ve como un entusiasta promotor de su hermana Lluvia Sala, candidata de Morena a la alcaldía.
Por andar en la grilla en contra de su partido, el centleco ha abandonado sus responsabilidades. Tiene sumida la delegación en los últimos lugares de los indicadores nacionales y aún así dedica su tiempo para hacer campaña por su pariente.
El esquirol forma parte de la cuadra de Pancho Herrera y se ha logrado mantener en el cargo bajo argucias de institucionalidad al gobierno de Adán Augusto López.
Creyendo que nadie se da cuenta en el pueblo, realiza trabajo de operación electoral en Frontera y de ello está enterado su jefe inmediato Agapito Domínguez Lacroix, subdirector general de Operaciones, quien según versiones de la misma delegación, se hace de la vista gorda.
Cosa rara. Un priísta operando la campaña de Morena en Centla y desplazando a los militantes de ese partido de AMLO.
Dagoberto Lara, presidente estatal del PRI, también duerme la mona y calla como momia.
La Morralla
La campaña de doña Yolanda no levanta en Centro. No prende, no transmite. Y además sus asesores de imagen le juegan chueco cuando difunden un spot donde alguien le pregunta de agua potable y se dedica a hablar de drenaje. Pena ajena *** Ojo con la violencia electoral en Jonuta. Alguien debe poner orden porque la sangre ya llegó al río y las autoridades ni ven ni oyen. Ya hubo un muerto, ¿quieren más? -0-0-