TIEMPO DE POLÍTICA

Después de año y medio de la pandemia del Coronavirus, SARS-CoV-2 (del inglés severe acute respiratory syndrome coronavirus 2), covid-19 (primero el, luego la) o como le cambien de nombre con la llegada de las variantes que afirman los que saben pueden sumar una decena, Tabasco se mantiene en la cola del regreso a la nueva normalidad al permanecer entre los cincos estados aún con semáforo naranja.
Y lo peor es que se ronda al semáforo rojo al presentar varios días la semana pasada un promedio de 400 contagios diarios, si bien la letalidad es mínima y baja la ocupación hospitalaria.
El dilema de las autoridades sanitarias y políticas del estado es si se pondrá mantener el semáforo naranja y no pasar al rojo durante las próximas dos semanas, con las graves consecuencias a la depauperada economía familiar.
¿Por qué estamos en los últimos lugares en los casos de contagio?
Si se realiza un recorrido por plazas comerciales, parques, mercados públicos, se observará el desparpajo con el que se comportan los villahermosinos, especialmente los jóvenes, al omitir la sana distancia y el uso del cubre boca, además de los antros clandestinos e itinerantes de los fines de semana..
Si la población se niega a acatar las recomendaciones sanitarias de todos los días a través de los diversos medios de comunicación convencionales y de las benditas redes sociales, es tiempo de que se considere la obligatoriedad a usar tapabocas y restringir las aglomeraciones en los lugares públicos.
De esta suerte, deberán considerarse dos planteamientos que han expresado hasta el cansancio las cámaras empresariales:
-No restringir los horarios de los negocios ni del transporte público, porque resulta contraproducente al compactar la asistencia, en lugar de adelgazarla con un horario más amplio.
-Modificar el criterio de los “negocios esenciales y los no esenciales” por “empresas seguras y no seguras”, hablando estrictamente en el acatamiento de los protocolos sanitarios.
Un tercer criterio a someter al análisis es que mientras se cierran los fines de semanas las plazas comerciales que a la vista aplican las reglas sanitarias con el requisito de acceso del uso del cubre boca, la toma de temperatura, aplicación de gel antiviral, los mercados públicos se mantienen abiertos todos los días sin control sanitario alguno.
Solo hay que ser valiente y darse una vuelta por cualquier mercado de la ciudad y del estado para observar el contagio potencial que se propicia con la ausencia de los controles sanitarios.
Un último punto a considerar por las Secretarías de Salud y Movilidad, es el planteamiento de los concesionarios del transporte público para que se vacunen ya a los choferes, en su mayoría menores de 30 años que mantienen un contacto directo con miles de pasajeros en todo el estado y son un vehículo potencial de contagio masivo del covid.

TIEMPO FUERA.- Regañiza presidencial a los morenistas que se comportan como sus pies de cría priistas:
«¿Qué es lo que tiene hacer? Darle continuidad al movimiento y ser consecuentes y devolverle al pueblo, pues la bondad que el pueblo ha ofrecido a Morena; ¿y qué es lo mejor? hacer a un lado la politiquería, no pensar en los cargos»
Andrés Manuel López Obrador

sfernandez@ddt.mx