CHAPALEO
HACE YA varios años el ingeniero Leandro Rovirosa Wade que fue gobernador de Tabasco, tomó de la mano a su nieto Gerardo Gaudiano Rovirosa, lo llevó a las oficinas de Andrés Manuel López Obrador, en el entonces Distrito Federal y ahí le dijo “aquí te dejo a mi nieto Gerardo, quiero que sea político”
LA PRIMERA casa política del joven Gerardo fue el PRD, allí creció bajo la mirada acuciosa del hoy Presidente de México donde acumuló experiencias y logró diversos cargos de elección popular; en esta ocasión sin olvidar el compromiso con su amigo y sin importar que sea otro partido le busca acomodo a su recomendado y lo coloca como diputado federal para protegerlo de las malignas vibras de sus enemigos.
SON TANTOS los distractores que nos disparan todos los días para mantener ocupados nuestros sentidos que como en las salas de cine las películas no tardan en cartelera, uno es el caso del permiso que dizque pedirá nuestro gobernador Adán Augusto López Hernández para irse a ocupar uno de los sillones en el gabinete presidencial.
AUNQUE ES reciente, a estas alturas eso parece chisme viejo, porque ya nos cambiaron de sintonía, pero afortunadamente queda gente de buena memoria y nos recuerda el caso de aquel ramo de frescas y perfumadas flores que el Presidente le trajo a nuestro gobernador -es trabajador, buena persona, responsable, honesto, leal- para justificar su separación o no del cargo.
UNO DE mis fans me envía su punto de vista “Bien, si el gobernador Adán Augusto tiene todas esas virtudes y valores, entonces ¿por qué existe la idea de separarlo de la gubernatura?
“TAN MALA suerte –dice- tienen los tabasqueños que podría existir la posibilidad que nos quiten a un gran gobernante con tantas cualidades? “Son solo palabras del Presidente AMLO que no justifican su decisión de llevárselo a su gabinete ¿para qué Adán no siga hundiendo económicamente al Estado?
OTRO LECTOR me dice “como sea, tres años son buenos para terminar el proyecto e ir por más”
HAY UNA expresión muy certera al respecto “cada día el panorama de los que se mueven en cargos públicos está más putrefacto. Ni a quien irle”
AQUÍ EN mi pueblo, aunque ya se ordenó a los propietarios de medios de comunicación que les bajaran el fuego a los camotes pa´que no se quemen, por debajo de las mesas hay quienes se dan pataditas en las espinillas y eso provoca escozor cuando se habla de la sucesión de Adán Augusto, claro, en el “supositorio” caso de confirmarse la licencia.
JAIME LASTRA Bastar está dispuesto al “sacrificio”; José Antonio de la Vega Asmitia, su boca dice NO, pero su corazoncito grita SIII, Guillermo Narváez Osorio, no dice SI ni NO, sino todo lo contrario; obvio, tendrán que rifársela con Octavio Romero y Javier May, que para ellos sería lo máximo porque es la única forma de ver colgada su fotografía en la sala de gobernadores.
Y CLARO que hay más, mucho más, pero por hoy me voy no sin antes comentarles que así, como por arte de magia, aparece una serie de distractivos empezando por la maraña de espionaje denominada Pegasus que acabó, -como decía la viejecita que me ensalmaba allá en mi ranchería Acachapan y Colmena tercera sección- “con la quinta y los mangos” y hasta con las intimidades de grandes pollones de la alta política; y otro, como si este fenómeno fuera la primera vez, le imponen millonaria multa a Samuel García porque él y su esposa hicieron transas para ganar la candidatura al gobierno de Nuevo León; el senador morenista Ricardo Monreal Ávila, molesto porque AMLO no lo incluyó en la lista de sus probables sucesores se le salió del huacal y dice que con o sin el sello de MORENA él va a aparecer en las boletas electorales del 2024, etc. ¿Otro distractivo? Los juegos olímpicos.