PARA USTED
A expensas que pueda ser desmentido por ustedes amables lectores, la paciencia, la tolerancia, el respeto y el diálogo, no forman parte de los “activos y cualidades personales e institucionales”, de Guillermo Arturo del Rivero León, nuevo secretario de Gobierno en la entidad.
Para nadie de la sociedad tabasqueña, incluida la clase política, partidista, empresarios, académicos y demás, es un secreto que el actual número “2” local, es bastante “pródigo” en protagonizar enfrentamientos y ataques frontales, con diferentes actores políticos y sociales, que por alguna u otra razón, han externado sus críticas y desacuerdos, al gobierno estatal de la Cuarta Transformación (4T)
Del Rivero León, no es hombre de consensos, sino de disensos; siempre busca el enfrentamiento y la confrontación a través de las benditas redes sociales; las descalificaciones son parte de su “menú” personal; hacer política no es su fuerte; pero para hacer la contra política, se pinta solo; en su actuación como coordinador jurídico del gobierno estatal, dejó constancia y ejemplos claros de ello.
Por eso llamó la atención, generando toda clase de comentarios que, en su primera entrevista de banqueta, Del Rivero León, dijera que en la secretaría de gobierno, ahora sí habrá diálogo y apertura para todos, en la búsqueda de la construcción de escenarios para conseguir estabilidad política, que por razones del todo conocidas, nunca pudo y nunca quiso hacer, el ex José Antonio de la Vega Asmitia.
Dejar las vísceras y hacer política, son de las primerísimas acciones que tendrá que hacer del Rivero León; dejar los twitters, los mensajes en Facebook y hacer de las redes sociales su “ring” favorito y espacio de pleitos para el desahogo, también será tareas del nuevo secretario de gobierno; si es que quiere acatar las indicaciones del gobernador Carlos Merino; aunque todos sabemos que responde y responderá, a su mentor; Adán Augusto López Hernández.
Dignificar a la Secretaría de Gobierno, como el espacio para el diálogo, los acuerdos, el entendimiento, en el entendido que la negociación política es ni todo para ti, ni todo para mí; es consensuar y concertar; que la bien llamada “casita azul”, deje de ser solo un escritorio desde donde se persigue, se ataca, se confronta y se descalifica, a quienes no están de acuerdo con el gobierno estatal.
Por lo pronto, Guillermo Arturo, deberá ganarse la confianza y el respeto institucional de todos los actores políticos, partidos, sociedad, empresarios y demás; deberá moderar y atemperar su conducta pública desde lo privado (incluidas las redes sociales, de las cuales es adicto). Ahora le tocará ser puente entre las causas sociales del pueblo y un gobierno caracterizado por no ver, no oír; un gobierno opaco y obscuro, sin transparencia y valemadrista.
Dejar de ver la paja en el ojo ajeno, por la viga que trae en el suyo; bien lo dice el ex legislador local Carlos Mario Ramos Hernández (PRI), “los problemas del estado no se resuelven en las redes sociales ni en Palacio de Gobierno, ni desde el escritorio, sino en las comunidades; dando la cara, dialogando, concertando, acordando y cumpliendo”.
En La Línea de Fuego** Respondemos a la pregunta llegada a nuestra mesa de trabajo**¿Por qué, Guillermo Arturo del Rivero León, omite ponerse su segundo nombre, (el de “Arturo”)? ** me cuentan que eso se debe a que su segundo nombre de Arturo, su señor padre, José Alberto Del Rivero (el popular y carismático “chebeto”), se lo puso en honor a Arturo Núñez Jiménez**pero, Guillermo, lo comenzó a omitir, cuando en el gobierno de Núñez, éste, no le dio ningún cargo al buen “chebeto”, al grado de que lo ignoraron todo el sexenio, por lo que a don José Alberto, no le gustaba que le dijera que pertenecía al grupo de don Arturo** al llegar la 4T, Guillermo, optó por no usar su segundo nombre.
En la Línea de Golpeo** Guillermo, no debe de hablar de corrupción, porque nuestros informantes, también nos indicaron (lo pregunté a otros personajes y ratificaron la especie), que en tiempos del gobernador Roberto Madrazo Pintado, Chebeto del Rivero, fue Presidente de la Junta Estatal de Conciliación y Arbitraje (JECyA)**el despacho particular de los Del Rivero, a cargo de Guillermo, (chebeto, no podía estar ahí), era el encargado de llevar todos los “buenos casos”, que representaban ganancias para los patrones y, como es lógico de imaginarse en la JECyA, todos los litigios eran siempre a su favor; los ganaban.
Los Malosos** Es evidente que a Guillermo Arturo del Rivero León, quien lo pone como Secretario de Gobierno, es el ex gobernador Adán Augusto López Hernández, por lo tanto la lealtad es hacia el nuevo titular de las principales oficinas en Bucareli**no responde pues Guillermo, a la lógica del gobernador Carlos Merino Campos; por lo que no hay lealtad, ni compromiso hacia el nuevo titular del Ejecutivo estatal**reportará con el nuevo inquilino del Palacio de Cobián.
Jaque Mate** por eso muchos de los otrora ataques, de Guillermo del Rivero, a través de las redes sociales, en contra de los críticos o enemigos del actual régimen, lo ubican, según sus malquerientes, como el “guardián” de Adán, hacia el interior del gobierno de Carlos Merino Campos**una especie de contrapeso, “por lo que pudiera ofrecerse”**recordando como Víctor Manuel Barceló, le quiso jugar las contras a Roberto Madrazo (cuando se fue a buscar la candidatura presidencial); pero no pudo porque Gastón Viesca (QEPD), desde Finanzas; Floricel Medina PérezNieto (Contraloría); Manuel Andrade Díaz ( desde el Congreso) y Javier López y Conde (TSJ), lo impidieron y cerraron filas, en torno al hijo del “Ciclón del Sureste”**fue todo por hoy**hasta mañana Dios mediante.