Para Usted
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La Secretaría de Desarrollo Energético de Tabasco (Sedener) está en un completo olvido; sin liderazgo, ni proyectos, ni una buena administración. La falta de compromiso y liderazgo de Sheila Guadalupe Cadena Nieto ha generado una especie de desintegración al interior de la dependencia, donde hay varios grupos que cuentan con sus propios cotos de poder. Aunque usted, no lo crea
Por un lado, está el grupo de la mismísima Sheila Cadena, conformado de “niñas fifís” (así se autodenominan, a manera de burla por esta expresión hecho popular por “ya saben quién”), y que no cuentan con capacidad alguna y mucho menos experiencia en el servicio público (empezando por la “jefa Sheila”).
Enfrente, está el grupo del ex titular José Antonio de la Vega Asmitia (Pepe Toño, para sus amigos), integrado por los subsecretarios Pablo Jiménez Pons y Mario Alemán; quienes manejan la gasolina que se le otorga a los municipios, dependencias y grupos de pescadores (los cuales suman montos de Miles de millones de pesos; un negocio redondo).
Finalmente, el grupo del administrador Jorge Castillo y su esbirra, la subdirectora de Recursos Materiales, Guadalupe Olmos. Este vacío de poder ha generado que la tal Guadalupe Olmos sea reconocida y llamada ya como la nueva mandamás de la SEDENER; llegándose a creer la dueña de las instalaciones y pasando por encima de la autoridad del administrador y de la misma Sheila Cadena; ¿y eso por qué?, preguntamos, porque Guadalupe Olmos es la mano derecha del administrador Jorge Castillo, quien ante su nula experiencia y capacidad sólo escucha los pésimos consejos y decisiones de Olmos.
Y a todo esto, ¿quiénes son estos dos singulares personajes que han puesto de cabeza a la SEDENER? Veamos, Jorge Arturo Castillo Martínez es licenciado y maestro en Derecho; su último puesto fue ser coordinador de casetas de la zona centro en la SCT federal; no se le conoce ningún puesto administrativo, por lo que se presume que carece de experiencia como administrador.
La “estrella de la película”, Guadalupe Olmos Jesús, es ex granierista; licenciada en Relaciones Comerciales, y el único puesto que ha ostentado es ser subdirectora de recursos humanos y materiales del INJUDETAB en los últimos 3 años de gestión de Andrés Rafael Granier Melo, de dónde se sabe salió con varios conflictos con el personal por su prepotencia y arrogancia; es hasta ahora que en 2021, tiene un nuevo cargo administrativo lo que pone en duda su capacidad al no contar con la experiencia ni con los conocimientos académicos para el cargo que le ha sido conferido.
Guadalupe Olmos es “la mano que mece la cuna”, pues como se mencionó anteriormente, la SEDENER al no tener un liderazgo, es ella quien ahora se cree la dueña, mandamás e incluso se siente la secretaria, y es quien da las órdenes al interior por encima del administrador.
Ha sido tanto su hambre de poder y de control que dentro de la secretaria la llaman la «Chacala», pues de acuerdo a testimonios al interior de la SEDENER es ella quien toma las decisiones del presupuesto que se maneja, incluso mandó a tapar las ventanas de su oficina, pues según dichos de los trabajadores cuando los proveedores llegan a entregar mercancía los invita a pasar y se presume que es para pedirles productos o el mal llamado «diezmo».
Los que más han sufrido por sus desplantes y su prepotencia han sido los trabajadores sindicalizados quienes se sienten atemorizados, pues Olmos incluso los ha amenazado con bajarles su salario o quitarles por completo su compensación, ya les ha quitado sus pases de salida temprano, sus días de permiso y les ha cambiado sus horarios y le prohibió la entrada a su área de comida por qué según ella la distraen de sus actividades.
Los pobres sindicalizados tienen que comer a escondidas o aguantarse el hambre hasta la salida; los trabajadores sindicalizados se sienten indefensos por qué piensan que sus representantes sindicales ya fueron comprados o amenazados por Guadalupe Olmos y no son capaces de defenderlos. Habrá más.
En La Línea de Fuego**Lamentablemente, aunque Guadalupe Olmos, la «Chacala», quiere tener el control de toda la institución, la realidad es que las instalaciones están por los suelos, los baños sucios, oficinas en mal estado y falta de limpieza en las áreas comunes; las únicas oficinas que se encuentran en buen estado son la de ella y por supuesto la del administrador y no le queda otra más que la de la secretaria, pero solo por puro compromiso.
En La Línea de Golpeo**Se nota que después de la salida del anterior administrador, Gustavo Mendoza, el orden, cuidado y limpieza de la secretaria está por los suelos. Olmos es el nuevo cáncer de la SEDENER con total complacencia de Arturo Castillo, quien al no tener la experiencia y capacidad como administrador solo escucha los malos consejos de la lengua viperina de Guadalupe Olmos, quien ya es cuestionada por su nula capacidad de resolver problemas, imponer su régimen de terror y contar con la desestimación de los trabajadores de la Secretaría, quienes cuestionan incluso su salud mental para ejercer un cargo público.
Los Malosos** Cómo se puede notar, existe una falta de liderazgo por parte de Sheila Cadena, quien, según sus palabras al tomar posesión, tendría las puertas abiertas y velaría por el bienestar de sus trabajadores y colaboradores; no obstante, la realidad es otra y mientras Guadalupe Olmos la «Chacala» asume el control de la SEDENER y maltrata a sus trabajadores, Sheila, está más interesada en viajar y salir bien en las fotos con el filtro adecuado para su abierta precampaña política.
Jaque Mate**Lo que no sabe es que por su pésima gestión ante la SEDENER ya está siendo considerada para ser una de las primeras bajas del 2022, sin embargo, tal vez tenga un as bajo la manga; pues se sabe (ella misma lo viene repitiendo constantemente), que apoyo «por debajo del agua» a la actual presidenta municipal de Centro, Yolanda Osuna Huerta, en las elecciones pasadas, pero eso es historia para otra columna**buen fin de semana**hasta el lunes, Dios mediante.