CARTA ABIERTA
El presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Jaime Lastra Bastar, tendrá un tema de trascendencia en las manos con la puesta en vigor de la llamada Ley Olimpia, que es La Ley contra el acoso digital. En teoría, deberá ser analizada por los legisladores antes de concluir el actual periodo de sesiones. La iniciativa será enviada al Congreso por el gobernador Carlos Manuel Merino, aunque no se sabe aún la fecha exacta en que esto sucederá.
Como se sabe, la Ley Olimpia es una reforma legal que impone penas de hasta seis años por difundir imágenes de contenido íntimo y sexual sin el consentimiento de la persona implicada y que entró en vigor en México el 2 de junio de este año.
De acuerdo a información publicada en el portal Deutsche Welle en español, el 1 de junio el Congreso mexicano aprobó la reforma que considera como delito divulgar, compartir, distribuir y publicar imágenes, videos o audios de contenido íntimo sexual de una persona adulta sin su consentimiento.
Además, establece como delito grabar, fotografiar, imprimir o elaborar contenido íntimo sexual sin autorización y sanciona la violencia mediática, definida como la agresión por cuestiones de género en un medio de difusión o comunicación.
La legislación contempla entre sus disposiciones y anexos la violencia digital de cualquier tipo en México, donde 19 de los 32 estados ya prevén en su legislación estatal un castigo contra el abuso digital. De acuerdo con la reforma, todo aquel que incurra en alguno de dichos delitos será sancionado con una pena de tres a seis años de prisión, además de recibir una multa de entre 44 mil 810 y 89 mil 620 pesos.
Esta es una adición de la Ley General de Acceso de las mujeres a una Vida Libre de Violencia, y al Código Penal Federal, que fue aprobada por el Senado en noviembre de 2020.
Ahora, el Congreso de Tabasco y del resto de las entidades federativas cuenta hasta el último día de diciembre de este año para realizar las adecuaciones legislativas que correspondan. Es decir, el Poder Legislativo local está a punto de poner este tema a discusión y aprobación en los próximos días.
La Ley Olimpia surge a través de un video íntimo de Olimpia Melo Cruz, el cuál fue difundido en redes sociales en el año 2014 por su anterior pareja, sin el consentimiento de ella. Esto generó que se sintiera humillada por las constantes burlas e insultos que recibía, por tal motivo, Olimpia, junto otras mujeres que habían sufrido acoso, impulsaron una iniciativa de Ley en Puebla, para reformar el Código Penal de dicha entidad federativa, logrando que se discutiera y que el legislador local la llevará a cabo en el año 2018.
Lo que se sabe, es que el gobernador Carlos Manuel Merino quiere sumar a Tabasco a los dieciséis estados en los cuales La Ley Olimpia está vigente, es decir: Puebla, Yucatán, Ciudad de México, Oaxaca, Nuevo León, Querétaro, Baja California Sur, Aguascalientes, Estado de México, Guerrero, Coahuila, Chiapas, Zacatecas, Veracruz, Guanajuato y Tlaxcala.
De acuerdo al jurista de reconocido prestigio nacional, Luis Mario Lemus Rivero, esta reforma es sumamente importante, toda vez que, con el desarrollo de la era digital, si bien hay actos jurídicos que están regulados y por consecuencia penados como lo es la violencia, hace falta adecuarlos a la realidad, es decir, a situaciones que se van dando naturalmente con el paso del tiempo, como lo es en este caso la violencia a través de la tecnología o los canales digitales.
En razón de lo anterior es que el mandatario estatal busca poner a Tabasco a la vanguardia de las disposiciones legales como las que se encuadran en la llamada “Ley Olimpia”, misma que pronto estará vigente en todo el país.
: ACLARACIÓN
En Tabasco no hay municipios quebrados, aseguró el gobernador Carlos Manuel Merino en el contexto del cambio de poderes en las 17 alcaldías.
Si bien Tabasco sigue contando con un «boquete financiero» de 6 mil millones de pesos, asegura que las finanzas son estables.
Es decir, se tiene lo suficiente para que no falten las nóminas e ir aplicando recursos en obras y otros rubros. No hay crisis financieras en los Ayuntamientos, ¡quién lo dijera!