El Tutupiche en Carta Abierta

¡Se adelanta el calendario de Morena!- le dijo don Vienenido Granda a su compañero de dolor, el Cuitlacoche, mientras desayunaban puro chile, antes de empezar a chambear, cuidando automóviles en conocida plaza comercial, regenteados por el Lic. Asco Aga Doblado.
¿Es un calendario de puras chicas morenas en bikini? -Preguntó entusiasmado el Cuitla, y a cambio recibió una peinada y luego tremendo cachetadón al estilo de las que le recetaba el Botijas al Chómpiras, sin tener cédula de médico, lo que le provocó que diera tres vueltas y media al frente en posición C, para caer precisamente de Coliflor, con la raya partida y morada.
¡Si serás tarúpido Cuitla!- lo ilustró el bigotón que canta en sus ratos libres guaracha a sus huaraches y boleros a los boleros del parque Juárez- toy hablando de los candidatos de Morena; de hecho este viernes 8 darán a conocer a los cinchos de varias alcaldías en la Ciudá de México.
¿Y acá en Tabasco cuando los darán a conocer?- replicó Cuitlacoche, mientras se sobaba los granos, que con tremendo izquierdazo, les floreó el ex Matancero, pero de puercos.
Bueno, Cuitla, se espera que todo el asunto a nivel nacional quede listón azul en dos semanas, por ahí del viernes 15; para ello van adelantar el género que tocará en cada municipio ¿Cómo la vez desde ay?- inquirió don Granda con su aguardientosa voz.
Pos como quiere que la vea, si nomás me dejó un ojo bueno, el otro me lo cerró con el bofetadón- refutó bien refutado el hijo del máiz.
Bueno Cuitla- prosiguió el hermano de Celia- doña Cheinbaum quiere que todo quede listo, antes del 20.
¿Y por qué antes del 20? ¿Para qué no les caiga el 20 a los demás?- rebatió Cuitlacoche, mientras se rebatía los granos del cachete con un trozo de hielo.
En efecto mi querido Hongo Sapiens- aderezó el mostachón- pa´ que la Cheinbaum pueda cenar a gusto en navidad y año nuevo, sin ningún desaguisado ni nada que le produzca retortijones; tons será hasta después del Día de Reyes que los inconformes podrán pegar de brincos, pero ya sin el mismo efecto.
En eso se acabó la plática porque empezaron a llegar vehículos, no de compradores, sino de los doctores del ISSET, que en contubernio con los franeleros, ocupan los espacios que corresponden a los marchantes.