CÁBALA

Si la 4T pretendía enviar un mensaje contundente con la aprehensión de “Cuco” Rovirosa, algo salió mal con la reaparición de María Asunción Selván ayer en el Congreso Local.

Tomando en cuenta que la cámara de diputados es la caja de resonancia de los asuntos públicos en el trópico, permite el hecho de establecer diferencias entre un ex alcalde que terminó sin afiliación partidista y una ex alcaldesa que reactiva con su aparición, su actividad política.

Retoma de paso, los distintos caminos que han tomado los señalamientos de corrupción contra José Eduardo Rovirosa Ramírez y Roberto Villalpando Arias, ambos de la misma comuna.

Los ex alcaldes caminaron en medio de las denuncias sobre obras públicas mal ejecutadas y desviaciones presupuestales. También fueron denunciados en su momento de meterle el diente al erario, acciones que en los tiempos de la 4T es pecado mortal.

Por ello, la reaparición de ayer de la ex alcaldesa de Jalapa y el lugar donde lo hace, ha llamado la atención de propios y extraños.

La expresión “vine a visitar a unos amigos”, con la que remató su entrevista a medios de comunicación a su arribo ayer al poder legislativo, genera lecturas obligadas de un congreso que desde su llegada, dejó en claro que los tiempos del amiguismo y la protección oficial habían quedado en el olvido.

Si bien el “tepetiteco” tiene tres cuentas consecutivas reprobadas y ningún amigo en el poder, la ex alcaldesa de Jalapa que navegó con bandera de la protección política en su último ejercicio municipal, presume ahora amigos en un riesgo innecesario.

Normalizar los temas de corrupción en ambos bandos, es un lujo que no puede tomar la 4T en medio de los señalamientos que en el ámbito nacional han ocupado la agenda mediática y política.

Refleja de paso que “el Team Núñez”, continúa siendo intocable y hasta innombrable en la ruta de las investigaciones por corrupción en Tabasco.

Uno de los principales retos que enfrenta la Cuarta Transformación de la vida pública de México es recuperar la confianza ciudadana en las instituciones encargadas de vigilar el uso de recursos públicos.

Recuperar la conciencia pública sobre los impactos que arrojan sentimientos de impunidad es la agenda pendiente de la 4T, que dicho sea de paso, se ha convertido en el Talón de Aquiles al que todos le apuntan.

En materia de combate a la corrupción, no puede haber pasos en falso, ni lecturas que sospechen arreglos en la tierra del Presidente.

“Chonita” reapareció en mal momento, “Cuco” pasó a segundo término. Lo demás ya el corrido lo dirá.

KYBALIÓN.- Manuel Rodríguez González, Marcos Rosendo Medina Filigrana y Karla María Rabelo Estrada, pujaron ayer en Tabasco con la plana mayor del congreso federal a fin de retomar la vocación agroindustrial del sureste, en tiempos que se requiere preparar al estado, de no depender exclusivamente de los recursos petroleros.

Desde los tiempos del Plan Balancán-Tenosique, no se ha considerado impulsar el uso adecuado del bajo Usumacinta para detonar este polo de desarrollo. La presentación del proyecto que generará una derrama superior a los cinco mil millones de pesos y 40 mil empleos en los estados de Chiapas, Campeche y Tabasco, fue presentada al gobernador Carlos Manuel Merino Campos, por los  diputados federales Rubén Muñoz Álvarez y Salim Rodríguez Salomón, presidentes de la Comisión de Recursos Hidráulicos y de Asuntos de la Frontera Sur del congreso federal.

El ambicioso proyecto pretende aprovechar las más de 250 mil hectáreas que poseen Tabasco, Campeche y Chiapas de área irrigable y con la aplicación de nuevas tecnologías, promover el desarrollo económico, la autosuficiencia alimentaria y la generación de empleos en la región.

Que sea para bien.

Por Daniel Castro

Licenciado en Psicología, reportero, columnista. Larga trayectoria profesional, comenzando en el diario Avance, y siguiendo por Novedades, Presente, Tabasco al Día, Tabasco Hoy y hasta la fecha en Diario de Tabasco con la columna Cabala.