LA AGENDA EN RED
Adán Augusto López Hernández está cabildeando en el Senado y el presidente, López Obrador, continúa estirando la liga, al parecer, para qué no se resuelva el tema de la modificación legal de la seguridad pública.
De acuerdo con las respuestas dadas hoy en la mañanera por parte del presidente López Obrador, el enfrentamiento continúa entre él y la oposición. Comentó que Si los militares regresan a sus cuarteles “la delincuencia hace fiesta”, al exponer una vez más la iniciativa de reforma constitucional para ampliar la colaboración de las fuerzas armadas en acciones seguridad pública.
Sin embargo, si la ciudadanía se pronuncia en la consulta (cuestión que se ve imposible) que se realizará en enero porque los soldados y los marinos dejen esas labores, entonces sí aceptaría el retorno a los cuarteles.
Y en forma retadora dijo “A ver: ¡300 mil (soldados) a sus cuarteles ya! Pues hacen fiesta los de la delincuencia, y no sólo los de la delincuencia organizada, sino los de la delincuencia de cuello blanco”, respondió ante una pregunta sobre el posicionamiento que el domingo hizo el Comité 68, al conmemorar un aniversario más de la masacre del 2 de octubre de 1968, donde exigió que los militares no permanecieran en las calles.
“Imagínense, retiramos a los marinos de los puertos, salen todos los marinos del puerto de Manzanillo. ¿Quiénes regresan? Los que permitían la entrada de fentanilo y del contrabando y todo. Por eso voy a insistir, nada más termina el (actual) periodo de sesiones, como lo establece la ley, e inicia el nuevo periodo, va la iniciativa de nuevo”.
Pareciera ser que no le interesa resolver este tema y pretende llevar todo esto a una consulta popular desvinculada al INE.
Lo que si se deja ver es que al parecer trata de medir su popularidad de aquí al 2024.
Aquí el problema radica en que el gobierno considera que esta opción se realice, aunque se tenga que gastar cifras millonarias en esa consulta.
Ojalá que a los representantes populares de oposición esto les baste y que les importe más el gasto innecesario que se hará, a cómo se está viendo qué ocurrirá, votando a favor de esta modificación de ley. En fin, el ejercito esta hoy en las calles y ahí seguirá.
Decir que el ejército se ira a los cuarteles es solo una velada amenaza de retirarlos de las calles, y esto no se hará porque la policía estatal y municipal del país, no tiene capacidad alguna para detener al crimen organizado y eso lo sabe bien.