LA AGENDA EN RED
Desde mi punto de vista, en nuestro país crecen las dudas sobre la verdadera independencia del sistema de justicia. La gente empieza a preguntarse si los jueces y ministros de la Corte, elegidos tras la inédita jornada electoral en el poder judicial, actuarán realmente con justicia o si, por el contrario, estarán siendo influenciados por el gobierno o intereses políticos.
Muchos temen que el poder judicial pueda estar en manos de quienes hacen favor al gobierno, en lugar de aplicar la ley de manera imparcial. Esto genera dudas muy fuertes: ¿será la justicia verdaderamente justa o solo favorecerá a quienes tienen poder o están alineados con el gobierno en turno?
Si los inversionistas y las empresas, tanto nacionales como extranjeras, creen que los juicios pueden ser manipulados por motivos políticos, simplemente dejarán de confiar en invertir en nuestro país, especialmente en zonas consideradas de riesgo. La percepción de que el sistema judicial puede estar de lado del gobierno, en lugar de ser un árbitro imparcial, puede afectar seriamente la economía y el bienestar de todos.
Por eso, la preocupación por las posibles consecuencias económicas de estas decisiones es muy grande. La gente necesita saber que la justicia será realmente independiente, que no será utilizada para beneficiar a nadie más que a la ley y a la verdad. Solo así podremos tener confianza en que el país va por buen camino, y que las decisiones de los jueces no estarán al servicio de intereses políticos, sino de la justicia y la justicia misma.